“Sin una población sana no se puede tener un país productivo”, aseguró el doctor Germán Fajardo Dolci, director de la Facultad de Medicina (FM) de la UNAM, durante su conferencia magistral “Prioridades de salud en México”, en la que destacó los aciertos y deficiencias del sistema de salud nacional, detalló los factores que determinan el bienestar de la población y comparó cifras relacionadas con la esperanza de vida y los principales padecimientos que afectan a los mexicanos.

Al participar en el 1er Congreso interdisciplinario del área de la salud, celebrado en el auditorio “Doctor Raoul Fournier Villada”, afirmó que la salud es un derecho de la humanidad, un igualador social junto con la educación, que “para muchos mexicanos es todavía una aspiración”.

La salud está determinada por la Genética, el  estilo de vida, la educación, el medio ambiente, la familia, la alimentación, el ingreso económico y el empleo de cada individuo, factores que influyen también en el desarrollo físico y cognitivo durante la infancia, la productividad y las relaciones interpersonales, explicó.

Por otra parte, el doctor Fajardo Dolci resaltó que en la actualidad se destina cerca de 5.8 por ciento del producto interno bruto al Sistema Nacional de Salud, lo cual, aun con las aportaciones del gobierno, resulta insuficiente para atender las necesidades de la población.

“El sistema público de salud cuenta con cerca de 23 mil unidades, mil 400 hospitales y más de 224 mil médicos. En un día ofrece cerca de 1.1 millones de consultas externas y atiende alrededor de 4 mil nacimientos y 102 mil urgencias”, señaló el director de la FM.

Por otro lado, mencionó que anualmente 120 millones de personas visitan un consultorio de farmacia, “lo que equivale a 10 millones de pacientes por mes”.

Entre las comparativas que presentó el doctor Fajardo Dolci destacó la de esperanza de vida en México, donde, en 2016, Sinaloa obtuvo el primer lugar, seguido de Nuevo León y Tlaxcala, mientras que Chiapas, Veracruz y Tabasco, se colocaron en las últimas posiciones.

“De 1990 a 2016 la esperanza de vida en nuestro país aumentó 4.9 años, de 71.5 a 76.4 años”, señaló el doctor Fajardo tras hablar sobre el incremento en la población de la tercera edad. “Se estima que en 2042 haya más personas mayores de 60 años que niños menores de cinco, por lo que es importante trabajar en la formación de geriatras”, reiteró.

El director de la FM habló también de los índices de morbilidad y mortalidad, así como de la necesidad de aprovechar los recursos humanos, económicos y de infraestructura, fortalecer al sector y atender los principales padecimientos de la población: diabetes, sobrepeso y obesidad, embarazo en menores de edad y cardiopatías.

“El Estado no ha regulado los recursos en salud y eso se refleja también en el número de escuelas especializadas en Medicina (164), tanto públicas como privadas, lo cual obedece a agentes económicos y sociales», agregó.

El doctor Fajardo Dolci invitó a la comunidad médica y a la sociedad en general a realizar acciones conjuntas que mejoren el sistema de salud. “Sólo juntos podemos aspirar a un México mejor”, concluyó.

Seguridad del paciente

Por su parte, el doctor Enrique Acosta Gío, académico de la Facultad de Odontología de la UNAM, destacó que desde la academia ya se promueva la cultura de seguridad del paciente.

El especialista resaltó que los eventos adversos son prevenibles en las prácticas de los estudiantes si se consideran algunas recomendaciones, como: desarrollar una cultura de seguridad, vigilar la calidad de los registros clínicos, esterilizar todo el instrumental, poner cuidado al prescribir medicamentos, limitar la exposición innecesaria a la radiación ionizante, no reutilizar desechables, proteger los ojos del paciente y evitar que ingiera o inhale materiales, usar una lista de cotejo en todas las cirugías, vigilar las infecciones bucales y tener un protocolo de acción ante emergencias.

Asimismo, recomendó que las escuelas y facultades consulten y utilicen la Guía Curricular sobre Seguridad del Paciente de la Organización Mundial de la Salud y se continúe promoviendo la inclusión del tema en los planes de estudios.

El doctor Acosta Gío explicó que, debido a que la atención odontológica es ambulatoria y el paciente se siente bien al retirarse, los profesionales no detectan muchos de los eventos adversos cuando ocurren; además, es difícil conocer la situación epidemiológica, pues se ejerce principalmente en la práctica privada.

Valeria Cuatecatl y Lili Wences