La Organización Mundial de la Salud (OMS) dio a conocer en 2008 el Informe de la “Comisión sobre los Determinantes Sociales de la Salud”. El subtítulo complementa el otro elemento básico: “Cerrando la brecha en una generación”, en referencia a las desigualdades en salud y el tiempo para lograrlo. De esta manera, ambos problemas entran juntos a la agenda global.

El doctor Jorge A. Ramírez Hernández, académico de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Medicina de la UNAM, desarrolló la historicidad de estos conceptos revisando algunos ejemplos: el caso de un país industrial considerado clásico, el Reino Unido; otro neo-industrial, China; o agrícolas de bajo ingreso per cápita, Sri Lanka y el estado de Kerala en la India. En los años setenta y ochenta del siglo pasado llamaron la atención internacional por mostrar indicadores de salud comparables a los de países de alto ingreso.

En la plática impartida por Facebook Live de la Facultad de Medicina, describió las políticas sociales seguidas en estos países para lograrlo: satisfacción de las necesidades claves en alimentación, escolaridad, y salud, con participación social. De ahí se nutrieron las políticas internacionales que incorporaron estas experiencias como las de atención primaria de la OMS.

Finalmente, el doctor Ramírez Hernández caracterizó a México como muy desigual en lo social y económico, con un proceso industrial trunco con amplias áreas de agricultura, algunas tecnificadas y otras de temporal. Por lo cual, consideró que, para avanzar cerrando la brecha de la desigualdad en salud, es necesario aprender de estos ejemplos internacionales y comenzar a preparar un escenario post COVID-19, con base en una sólida atención primaria adecuada al siglo XXI.

Janet Aguilar