“La fisioterapia ha tenido un impacto considerable en la atención de pacientes COVID-19 y el momento ideal para implementar intervenciones de fisioterapia será el día 10 después del inicio de los síntomas”, indicó la licenciada Kenya Guadalupe Monroy Segundo, fisioterapeuta encargada de implementar valoraciones, generar diagnósticos funcionales y crear planes de tratamiento para pacientes con SARS-CoV-2 en la Unidad Temporal COVID-19 (UTC-19) del Centro Citibanamex.

Asimismo, consideró que el fisioterapeuta debe ser analítico para poder determinar qué tipo de intervenciones pueden ser implementadas en pacientes COVID, de acuerdo con el tiempo de evolución, el tipo de oxigenoterapia, la gravedad de los síntomas, entre otros parámetros de control. Las principales intervenciones fisioterapéuticas que se han utilizado para contribuir en la recuperación de estos pacientes son: manejo de patrón ventilatorio, técnicas de higiene bronquial y entrenamiento de la funcionalidad.

Por otro lado, “la fisioterapia en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) ha tenido un papel considerable, para contrarrestar complicaciones después de la estancia en estas unidades y se ha demostrado que una intervención temprana en pacientes críticos mejora la calidad de vida a largo plazo”, explicó la licenciada Monroy Segundo durante el webinar “Fisioterapia en pacientes COVID-19”, transmitida por Facebook Live de la Facultad de Medicina de la UNAM.

La especialista enfatizó que los objetivos dentro de la UCI serán entrenar la musculatura respiratoria por medio de estrategias con ventilación mecánica, evitar el síndrome de reposo prolongado por los días de estancia en la UCI, conservar arcos de movimiento, evitar atrofias musculares y la aparición de úlceras por presión.

Mientras tanto, en el ámbito hospitalario se busca enseñar y enfatizar las técnicas de fisioterapia respiratoria, así como fomentar su funcionalidad. “Buscamos mejorar la función pulmonar por medio del manejo de la musculatura respiratoria y brindar una buena calidad de vida a los pacientes COVID-19”, señaló.

Igualmente, el fisioterapeuta debe ser capaz de dosificar un entrenamiento integral, con ejercicios de fortalecimiento, traslados, transferencias, técnicas de ahorro de energía, descargas de peso, ejercicios de equilibrio y deambulación de forma independiente.

Por último, en el tratamiento post-COVID los objetivos son aumentar la resistencia a la fatiga y mejorar el reacondicionamiento físico, ya sea para las actividades de su vida diaria o para que puedan reincorporarse a algún deporte.

“En la UTC-19 somos un equipo de más de 40 fisioterapeutas encargados de brindar atención a pacientes COVID-19, dejando en evidencia que la fisioterapia puede tener un impacto considerable en la recuperación de estos pacientes a pesar de los retos que implica esta nueva enfermedad y que el trabajo de un equipo multidisciplinario traerá consigo resultados de excelencia”, afirmó la licenciada Monroy Segundo.

Eric Ramírez