“La felicidad: reflexiones filosóficas y psicológicas” es una de las asignaturas optativas que pueden cursar las y los alumnos de la Licenciatura de Médico Cirujano de la Facultad de Medicina de la UNAM. Desde hace cuatro años ha sido impartida por el doctor José Rogelio Lozano Sánchez de manera presencial, quien ahora se enfrentó al reto de enseñar los contenidos en un periodo intensivo de dos semanas y en línea.

Al periodo intensivo se inscribieron 30 estudiantes que cursan del primer al tercer año de la licenciatura. Del 26 de abril al 7 de mayo, en sesiones de dos horas diarias, el académico impartió las 34 horas de un programa de estudios del cual habitualmente sólo se dan dos horas por semana.

En esta asignatura alumnas y alumnos interpretan el significado de la felicidad; el temario tiene cinco contenidos principales: “Reconocimiento de la felicidad”, “La vida desde un enfoque filosófico, biológico y social”, “La elección”, “La psicología positiva” y “Los otros”. Tiene un componente sincrónico que consiste en reuniones en la plataforma Zoom y una parte asincrónica de actividades y lecturas que se encuentran en la plataforma Classroom. “Impartir la materia de forma intensiva requiere un esfuerzo tanto de los estudiantes como de los profesores, implicó estar haciendo diariamente una planeación rígida, pero todo esto con la visión de una asignatura que ya he impartido por varios años”, explicó el doctor Lozano Sánchez, quien cuenta con una carrera docente de más de 30 años.

Para impartir la materia en la modalidad en línea tuvo que aprender a usar las herramientas que ofrece el Internet, tomó cursos tanto en la Facultad como en la Coordinación de Desarrollo Educativo e Innovación Curricular de la UNAM. Al haber pocas materias optativas impartidas en periodo intensivo, se le propuso trabajar en este proyecto que tenía posibilidades de ser bien recibido al llegar en un momento crítico para la Facultad, la Universidad y el país.

En opinión de los estudiantes

“Fue una experiencia inolvidable que todo estudiante de la Facultad de Medicina debería experimentar, incluso me atrevería a decir que todo el alumnado de la UNAM; pues no sólo se aprende para el futuro académico o laboral, sino que te prepara para la vida”, aseguró Diego Isaí Pescador Reyes, alumno de segundo año.

Por su parte, Ximena González Córdova, estudiante de primer año, expresó que “más allá del conocimiento adquirido, me llevo un aprendizaje emocional inmenso al estudiar de esta manera la felicidad y cómo impacta en mi vida; esas horas de clase, sin duda alguna, me marcaron para poder ser feliz”.

Asimismo, la alumna de segundo año María Fernanda Martínez Rio de la Loza aseguró que “más que una asignatura, es un lugar en el que logras desconectarte de la vida académica para conectarte con la vida misma, percibir emociones y ver el mundo que nos rodea, algo que muchas veces ignoramos”.

Ricardo Ambrosio