Los virus de ARN como el coronavirus tienden a tener mutaciones en su proceso de replicación; estas modificaciones afectan aminoácidos o proteínas virales, lo cual se puede traducir en cambios estructurales. Estos cambios causan que el virus se vuelva más infeccioso, dando lugar a las variantes que han aparecido alrededor del mundo. Actualmente, la variante delta surgida en la India es la más contagiosa y la que predomina en la mayoría de los casos de COVID de muchos países.

La doctora Rosa María Wong Chew, Jefa de la Subdivisión de Investigación Clínica de la Facultad de Medicina de la UNAM, explicó que el coronavirus ha cambiado durante la pandemia, por este motivo no se ha podido alcanzar la inmunidad de rebaño a pesar de que un alto porcentaje de la población ya se contagió o se vacunó. Esta situación también se debe a la variante delta, la cual es más transmisible, la diseminación por parte de los casos asintomáticos y la falta de implementación de medidas adecuadas para contener el virus.

Por otra parte, explicó que la Organización Mundial de la Salud clasifica a las variantes en dos grupos: las de interés (que presentan cambios en la proteína Spike que entra en contacto con las células humanas) y las de preocupación (las que son más transmisibles, evaden anticuerpos generados por enfermedad previa o vacunación, son de difícil diagnóstico o no responden a tratamientos actuales); las variantes alfa, beta, gamma y delta pertenecen a este último grupo.

Destacó que al parecer el SARS-CoV-2 no tiene un patrón estacional, por lo que los contagios pueden ser exponenciales en cualquier época del año e informó que el número de contagios que se han dado durante la tercera ola es superior al que se daba en picos anteriores de la pandemia, sin embargo, las vacunas han demostrado reducir el número de casos graves y muertes. Comentó que sólo las vacunas de Pfizer y Moderna han mostrado efectividad en niños de 12 a 18 años, actualmente no hay información suficiente sobre la vacunación en menores de 12 años.

“Mientras la gente siga moviéndose, teniendo contacto con otras personas, no use cubrebocas y no respete las medidas preventivas, el virus se seguirá transmitiendo y replicando, dando lugar a la posibilidad de que surjan variantes mucho más peligrosas. Debemos trabajar todos de la mano para combatir la pandemia”, señaló.

Asimismo, la doctora Wong Chew exhortó a la población a vacunarse y no aplicarse dosis adicionales tras completar el esquema, pues esto puede producir desabasto para las personas que aún no se vacunan. Recalcó que, incluso con la inmunización, la población debe seguir respetando medidas como el uso de cubrebocas, evitar espacios concurridos, lugares poco ventilados y aglomeraciones.

En la mesa de diálogo “¿Por qué no ha terminado la pandemia por COVID-19?”, transmitida por Facebook Live de la Facultad de Medicina, la doctora Guadalupe Soto Estrada, académica del Departamento de Salud Pública, comentó que cada pandemia es diferente, por lo cual la humanidad jamás estará preparada para enfrentarlas. Explicó que las variantes del coronavirus son un reto para el equipo de salud y pueden aumentar la mortalidad no necesariamente porque el virus sea más letal, sino por una transmisión más rápida, y señaló que es importante monitorear la evolución de estas variantes, además de que la pandemia tardará en finalizar y, en el mejor de los casos, es probable que se convierta en una enfermedad endémica como la influenza.

La especialista subrayó que la eficacia de las vacunas para evitar síntomas depende de cada tipo de variante; además, es necesario aplicarse esquemas de vacunación completos, ya que esto permitirá reducir el riesgo de complicaciones en caso de enfermar. También explicó que, si se quiere alcanzar la inmunidad de rebaño, es necesario vacunar a los niños, pues representan una gran parte de la población, por lo que se debe considerar a este sector y realizar más estudios para determinar la seguridad de la vacunación en ellos.

Destacó que hasta ahora las combinaciones entre dos o más vacunas aún no están aprobadas e invitó a la población a obtener información sobre las vacunas solamente de fuentes oficiales y confiables. “La pandemia sigue activa, el virus ya cambió y tenemos que adaptarnos a las nuevas circunstancias, la vacunación es muy importante pero no es suficiente para combatir la pandemia y ya lo estamos viendo. Sigan todas las medidas de salud pública y síganse cuidando”, recomendó la doctora Soto Estrada.

En su oportunidad, el doctor Jorge Baruch Díaz Ramírez, Jefe de la Clínica de Atención Preventiva del Viajero (CAPV) de la Facultad de Medicina de la UNAM, destacó que la diseminación del virus se relaciona con el comportamiento humano, el cual está influido por diversas determinantes sociales. Asimismo, las nuevas variantes han cambiado el patrón de dispersión comunitaria, aumentando los contagios en niños y jóvenes, principalmente en zonas donde se han reactivado las actividades educativas presenciales; en este sentido, recomendó a los padres de familia que tengan la posibilidad, mantener las actividades escolares en línea al menos hasta que ellos se hayan vacunado, para así evitar el riesgo de tener contagios o casos graves.

Indicó que algunos factores que han impactado negativamente en el número de contagios son la movilidad sin moderación que se dio a finales del año 2020 e inicios del 2021, la interacción social sin medidas sanitarias, aglomeraciones por eventos públicos y un proceso lento de vacunación.

Explicó que todas las vacunas son efectivas, sin embargo, la inmunidad no es inmediata y es necesario completar el esquema de vacunación, por lo que es conveniente no dejar de respetar las medidas para evitar los contagios. “Es necesario esperar un tiempo en el que nuestro cuerpo reacciona después de que nos las aplican”, comentó.

Recomendó a la población viajera aplicarse las vacunas a las que tengan acceso antes de preferir las que exigen otros países, esto con la finalidad de reducir el riesgo de enfermar o morir. También pidió no estigmatizar a las personas que se contagian de COVID-19.

De igual modo, el doctor Díaz Ramírez subrayó que la CAPV se ha mantenido activa desde el inicio de la pandemia y cuenta con un centro de diagnóstico de COVID-19, el cual brinda diagnóstico y seguimiento de casos positivos, opera en colaboración con otras instituciones y también tiene sede en el Centro de Estudios para Extranjeros de Ciudad Universitaria, en la terminal 1 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y en el Instituto de Oftalmología Fundación Conde de Valenciana.

Puedes obtener más información de los servicios de la Clínica en http://clinicadeviajero.unam.mx/

Ricardo Ambrosio