Las Golondrinas retumbaban en los muros del Palacio de la Escuela de Medicina. Eran las 13:10 horas del 17 de marzo de 1956. En la puerta, el director Raoul Fournier Villada despedía a la que fuera la casa de la Escuela Nacional de Medicina (ENM) durante 102 años.
En su libro, Crónica de la Facultad de Medicina (1950-1971) el doctor Humberto Gasca González relata: “Quienes fuimos testigos, quienes tuvimos la fortuna de estar presentes en este suceso histórico de la Medicina mexicana, nos sentimos embargados de la emoción que conduce al llanto, que no es debilidad sino nobleza”.
Las puertas comenzaban a cerrarse y por cinco minutos se escuchó a la banda tocar. En la Plaza de Santo Domingo, pañuelos blancos se agitaban en el aire y rostros nostálgicos miraban cómo se alejaba una época. “Si tus paredes oyen, querida Escuela, te agradecemos. De tus aulas han salido gentes ilustrísimas. No abandonaremos este edificio, seguirá siendo nuestro. Te damos nuestra despedida y escucha nuestros juramentos de que te veneraremos siempre como el primer día que venimos a estudiar”, expresó el doctor Fournier Villada ante el histórico edificio de República de Venezuela y República de Brasil.
A las 13:15, las puertas se cierran, aunque no para siempre. Afuera, la alumna Aída Lara G. sostiene la bandera de la ENM, escoltada por cadetes de la Escuela Médico Militar, y seguida de un grupo de atletas que llevaba un fuego simbólico. Cerca de las 17:30 horas, en el auditorio de la nueva Escuela, la flama era entregada a un alumno de recién ingreso.
El doctor Héctor Fernández Varela Mejía, entonces presidente de la Sociedad de Alumnos y actual director General de Atención a la Salud de la UNAM, daba la bienvenida a los alumnos de primer año y el doctor Fournier Villada dijo: “La aurora comienza, bienvenidos, han caminado en plena luz; desde el sol vertical que caía en Santo Domingo hasta este crepúsculo ligado con la aurora; las actuales reformas, el nuevo sistema pedagógico tienden a establecer un mayor acercamiento entre el profesor y el alumno”.
“La Marcha y el Himno de la Escuela fueron cantados por primera vez en la Ciudad Universitaria y las notas emotivas y vibrantes del Himno Nacional cerraron la serie de festejos que será inolvidable”, escribe el doctor Gasca González, cronista de la Facultad de Medicina de la UNAM.
“No vamos a realizar una mudanza, sino un cambio radical y profundo en el que haremos votos por mantener
siempre viva la flama que legaron nuestros antepasados”
Doctor Raoul Fournier Villada
Un nuevo hogar
A principios del siglo XX se tenía planeada la reubicación de la ENM, pero no fue sino hasta el 19 de octubre de 1950 que el Consejo Universitario aprobó por unanimidad construir las nuevas instalaciones y, a pesar de que se deliberó que el mejor lugar para hacerlo sería en el Centro Médico Nacional, en 1951 se comenzaron con las obras de la nueva Escuela en Ciudad Universitaria, donde ya se construía la Facultad de Ciencias de la máxima casa de estudios.
Asesorados por los doctores José Castro Villagrana y Maximiliano Ruiz Castañeda, los arquitectos que proyectaron el recinto fueron Roberto Álvarez Espinosa, Pedro Ramírez Vázquez, Ramón Torres y Héctor Velázquez.
En La construcción de la Ciudad Universitaria del Pedregal: concepto, programa y planeación arquitectónica, el arquitecto Mario Pani explica que la ENM fue pensada como el centro del grupo de Ciencias Biológicas, integrado por Odontología, Veterinaria y el Instituto de Biología, en donde el mural “La vida, la muerte, el mestizaje y los cuatro elementos”, de Francisco Eppens, ahora símbolo de la FM, se erigiría como el eje visual que hermana el conjunto.
Mariana Montiel
1.
2.
3.
4.
5.
62° ANIVERSARIO
Llegando a Ciudad Universitaria
1. En 1951 comenzaron las obras de la Escuela Nacional de Medicina (ENM). En la imagen de 1953, trabajan en el piso de la explanada.
2. Francisco Eppens durante el proceso de su mural “La vida, la muerte, el mestizaje y los cuatro elementos”. El artista potosino la consideraba su mejor obra.
3. La despedida del Palacio de la Escuela de Medicina en 1956. De izquierda a derecha, los doctores Efrén Carlos del Pozo, Raoul Fournier Villada, Ignacio Morones Prieto y Francisco Fernández del Castillo.
4. Auditorio principal de la ENM, ahora llamado “Doctor Raoul Fournier Villada” en honor al director que encabezó el traslado y una época de cambios.
5. Escultura de Asclepio o Esculapio. Originalmente se encontraba frente a un espejo de agua, ahora se ubica a la entrada de la Biblioteca “Doctor Valentín Gómez Farías”.