Los métodos anticonceptivos impiden la capacidad reproductiva de un individuo o de una pareja, ya sea de forma temporal o permanente; sin embargo, el desconocimiento de su uso o aplicación puede derivar en un embarazo no planeado o en una enfermedad de transmisión sexual.

Datos ofociales indican que uno de cada cinco embarazos en México corresponde a una mujer de 19 años de edad. Además, todos los días 17 adolescentes de entre 10 y 14 años se convierten en madres y se estima que el 33.4 por ciento de mujeres adolescentes que iniciaron su vida sexual lo hicieron sin protección anticonceptiva.

“Este es el panorama actual del país, por lo que no sólo se trata de hacer conciencia al respecto, sino que se pongan la camiseta de médicos, estudiantes responsables, humanistas, difusores de información científica, en concordancia con la Misión de la Facultad de Medicina”, instó la doctora Guadalupe Sánchez Bringas a los alumnos de primer ingreso al inaugurar el simposio “Métodos anticonceptivos”, organizado por el Departamento de Embriología, a su cargo.

Reunidos en el auditorio “Doctor Raoul Fournier Villada” y vía streaming en el auditorio “Doctor Alberto Guevara Rojas”, los estudiantes escucharon a la doctora Susana Haquet Santana, profesora de la Facultad de Medicina y organizadora del evento, quien destacó que existe una gran variedad de métodos anticonceptivos, los cuales se recomiendan de acuerdo con las características de cada persona.

Señaló que el preservativo masculino y la píldora de emergencia son los métodos más conocidos por los jóvenes, lo cual es grave. ”Conociendo el ciclo sexual de la mujer y cómo se da un embarazo lo podemos evitar. ¿Qué es lo que produce la ovulación? El pico de la hormona leutinizante. La primera mitad del ciclo está comandada por las células de nuestro folículo, y el segundo periodo se rige por la progesterona. Éste es el blanco y el mecanismo de acción de todos los hormonales. Aquí está la relación con la Embriología”.

Comentó que hay métodos reversibles, los cuales se clasifican en naturales, como el ritmo; de barrera (el condón, el diafragma o los espermicidas); mecánicos, como el dispositivo intrauterino; y hormonales (orales, inyectables, subdérmicos y transdérmicos). Además, están los irreversibles, como la vasectomía y la ligadura de trompas.

Los alumnos conocieron las características y el modo de acción de los diferentes anticonceptivos, de voz de especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social y la Secretaría de Salud de la Ciudad de México, entre otros.

Para reforzar los conocimientos sobre el tema, el Departamento de Embriología convocó a la exposición de Infografías. “Puma sin embrión”, “Coge conciencia, ponte condón” y “Métodos anticonceptivos: Que la única bendición sea conocerlos”, fueron algunos de los títulos.

Lili Wences