El 7 de enero de 1579 se dictó la primera lección de Medicina en la Real y Pontificia Universidad de México. Este acontecimiento marcó el inicio de la disciplina, no sólo en nuestro país, sino en todo el continente americano. Para celebrarlo, el Palacio de la Escuela de Medicina fue el escenario del evento “Cátedra Prima 2019: la Facultad de Medicina a los 440 años de inauguración de su primera cátedra”.

El doctor Germán Fajardo Dolci, director de la dependencia, destacó que tras poco más de cuatro siglos de historia es importante “reflexionar dónde nos encontrábamos, de dónde venimos, lo que hemos hecho bien y lo que podemos mejorar”. En este sentido, reconoció que el reto que representa el constante cambio tecnológico y científico que se ve reflejado en la enseñanza de la Medicina, sólo podrá ser enfrentado “viendo hacia el pasado y planeando los escenarios para formar a los mejores médicos del país”.

La Universidad de Salamanca, España, es reconocida como la antecesora de la enseñanza médica que se practicaba en nuestro territorio, pues la Real y Pontificia Universidad de México estaba adscrita a sus estatutos.  Por ello, la conferencia magistral fue dictada por el doctor Antonio Carreras Panchón, catedrático de Historia de la Medicina de esa institución, quien se remontó al siglo XVI para reseñar cómo se impartía Medicina en Salamanca.

El especialista destacó que está disciplina fue de las primeras actividades en ser profesionalizadas, en una ciudad prioritariamente estudiantil. Quienes buscaban aprender Medicina escuchaban la lectura de los catedráticos que leían los libros autorizados; pero, previo a ello, debían cursar dos años recibiendo instrucción sobre Filosofía natural y Astronomía.

La Cátedra de Prima era impartida por la mañana, mientras que la de Vísperas al iniciar la tarde. La filosofía médica que se reproducía en las aulas de Salamanca provenía de textos escritos por Hipócrates  y una interpretación de Galeno, apegados a la versión más original.

Con el tiempo se sumaron cátedras clínicas en el hospital de la propia Universidad y la de Anatomía en un pequeño anfiteatro que fue construido con el tiempo.El conocimiento de la Medicina se trasladó a América con Juan de la Fuente, quien dictó la primera Cátedra en la Real y Pontificia Universidad de México.

Al respecto, el doctor Gerardo Martínez, investigador del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación (IISUE) de la UNAM, explicó cómo De la Fuente se convirtió en catedrático tras ser el único candidato que se postuló para el puesto, ganando nueve pesos al mes. Por su parte, el doctor Armando Pavón Romero, también investigador del IISUE, reseñó la consolidación de la universidad como institución, la cual apareció en la Edad Media y posteriormente se trasladó al «Nuevo Mundo».

Los doctores Martha Eugenia Rodríguez Pérez y Carlos Viesca Treviño, jefa y académico del Departamento de Historia y Filosofía de la Medicina, relataron cómo eran los planes de estudio que enmarcaron las cátedras de Medicina en la Real y Pontificia Universidad de México, incluyendo la Cátedra Prima, “gracias a la cual estamos todos aquí”, destacó el doctor Viesca Treviño, quien invitó a los estudiantes a reflexionar sobre la responsabilidad que significa ser parte de una tradición médica tan ancestral.

Samedi Aguirre y Samantha Cedeño