Eficiencia y optimización de recursos

La División de Estudios de Posgrado (DEP) de la Facultad de Medicina implementó, desde el ciclo escolar 2018-2019, las evaluaciones remotas del Plan Único de Especializaciones Médicas (PUEM) en sus 19 sedes foráneas, lo que ha permitido promover el uso de la tecnología en la educación, la colaboración interinstitucional y un ahorro significativo en los gastos de aplicación (tanto en viáticos como en insumos).

“De las mil 420 evaluaciones que se aplicaron en el ciclo 2018-2019, 830 fueron remotas, lo que representa el 58 por ciento. Además, se cuenta con un banco de 31 mil 952 reactivos y 6 mil 559 casos clínicos”

Forman parte de la calificación final de los cursos de especialidades, se realizan anualmente (en noviembre) y tienen como objetivo principal medir el desempeño teórico de los residentes a través de instrumentos estandarizados, los cuales se actualizan de manera constante y se realizan con aportes de los profesores de los subcomités académicos.

“En las evaluaciones remotas se trabaja con ocho universidades que han adoptado el PUEM. Nuestro propósito es ampliar cada vez más esa cobertura, a través de un programa nacional de homogenización tanto en planes de estudio como de instrumentos de evaluación en universidades con posgrado en México, y hacer más específicos los instrumentos para que nos proporcionen evidencia del proceso del desarrollo cognitivo e intelectual del alumno”, afirmó el doctor Luis Manjarrez, jefe de sección académica de Evaluación del Aprendizaje de la Subdivisión de Especializaciones Médicas de la DEP.

Las evaluaciones remotas cuentan con medidas de seguridad que garantizan la transparencia en su aplicación. Los alumnos se conectan en un horario, lugar y día específico, con una contraseña que se les proporciona minutos antes. Al ingresar, el sistema les solicita su geolocalización, si intentan entrar desde otro lugar, el sistema ya no lo permite.

Asimismo, si el residente pretende copiar, se activan mecanismos de detección temprana y se bloquea el sistema; además, hay responsables académicos en cada una de las sedes, quienes vigilan que los sustentantes no utilicen elementos tecnológicos ni apuntes, explicó el ingeniero Kristofer Lugowski, responsable de los sistemas de cómputo de la Subdivisión de Especializaciones Médicas de la DEP.

El siguiente paso es reducir el tiempo de evaluación. Actualmente se hace en 14 días y se prevé que se realice en tres, lo que permitirá a los profesores tener los resultados más rápido y evaluar mejor. En el Centro de Evaluación Automatizado del Centro Cultural Universitario Tlatelolco UNAM se evalúan a los residentes de las 85 sedes ubicadas en la Ciudad de México y su zona metropolitana.

Lili Wences