Una persona desaparecida, en México, es toda aquella cuyo paradero se desconoce y se presume que esté desaparecida como consecuencia de cualquier delito, sin importar cuál sea éste, lo cual puede incluir, por ejemplo, a víctimas de trata de personas, secuestro, homicidio, feminicidio, violencia intrafamiliar, privación ilegal de la libertad, delincuencia organizada y sustracción de menores, entre otros.

Por ello, con la finalidad de que los estudiantes de la Licenciatura en Ciencia Forense (LCF), y público en general, entiendan estos conceptos sobre la desaparición y búsqueda de personas, se celebró la segunda sesión de las “Primeras Jornadas de Discusión: Las Ciencias Forenses frente a la búsqueda y localización de personas”, moderada por la doctora Zoraida García Castillo, Coordinadora de la LCF, con el tema “Métodos y técnicas de investigación para la búsqueda y localización de personas”.

El doctor Javier Yankelevich, Director de Operaciones de Búsqueda en la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas (CNB), aconsejó a los futuros científicos forenses nunca asumir que todos los desaparecidos fueron víctimas de delito, pues estarían reduciendo las hipótesis de localización, las restricciones de derechos familiares y el achatamiento del análisis contextual.

Por otro lado, destacó que las Ciencias Forenses han aportado a esta labor la investigación documental, un trabajo completo en las labores de campo, una más ordenada captura de datos y un mejor análisis de datos con base en los archivos almacenados.

Por su parte, la doctora Sonja Perkic, Directora General de Acciones de Búsqueda de la CNB, habló del protocolo homologado de búsqueda, la búsqueda individualizada y generalizada, y la metodología aplicada en la elaboración de planes de búsqueda, desde una perspectiva práctica.

“La planificación de una búsqueda necesita de una gran gestión. Se aplica el método hipotético-deductivo, es decir, a partir de una información inicial, comenzamos a realizar los planes de búsqueda. La información puede ser de todo tipo, como antecedentes de la desaparición, con datos recabados, con jornadas geográficas, características naturales y artificiales del lugar, fotografías e información proporcionada por familiares de personas desaparecidas”, explicó la especialista.

Finalmente, el doctor Mirsha Quinto Sánchez, académico de la LCF, dijo que las máximas de las búsquedas son entender que estas son una emergencia y están ligadas al esfuerzo de la investigación; se necesita buscar indicios y sujetos; confinar el área de búsqueda; aplicar los recursos apropiados y entrenados; documentar decisiones y asignaciones; incluir las variables de la capacidad de detección en la planificación; la asignación de esfuerzo combinada con la capacidad de detección puede maximizar la probabilidad de éxito; y la meta final de una búsqueda es el éxito en la menor cantidad de tiempo posible.

“Pretendemos que no nada más estemos enfocados en la evidencia científica, sino hacer contacto con otras instituciones y colectivos, con toda persona que se encargue de la gestión de búsquedas y de identificación humana. Finalmente, con todo esto llegar a la creación de políticas para mejorar la situación del país”, concluyó.

Eric Ramírez