#ResilienciaEnPandemia

David Daniel Flores Serrano, alumno de la Licenciatura en Ciencia de la Nutrición Humana, está seguro que la situación de la pandemia mejorará, pues “siempre hay que pensar lo mejor, ser positivos, no perder la esperanza y que no nos venza la desesperación, ya que aunque es algo tedioso, aburrido e incluso abrumador, podemos ver que no falta mucho y que todo mejorará muy pronto, pues las vacunas ya están siendo aplicadas para la gran mayoría de la población y eso nos da una luz en el camino para ver que sólo es cuestión de tiempo y cuidado para que esta pandemia llegue a su fin”.

Lo primero que hizo para adaptarse a esta nueva realidad fue “aceptar que la vida había cambiado, que ya no había marcha atrás y ahora debíamos adaptarnos a nuevas condiciones como el uso del cubrebocas, la careta, la llamada ‘sana distancia’ y utilizar de manera muy frecuente el gel antibacterial. Al principio era muy molesto e incómodo tener que seguir estos estrictos protocolos de sanidad; sin embargo, sabía que era necesario para proteger mi salud y la de los demás y puedo decir ahora que esto ya es un hábito para mí y ya me siento adaptado a este nuevo estilo de vida”.

David comenta que lo que lo ha impulsado a seguir adelante es “el hecho de que pronto todo regresará a la normalidad, que llegará un punto en el que ya podremos estar sin cubrebocas ni careta, que podremos regresar a los lugares que más nos gustan, que tendremos también la oportunidad de volver a gozar de los eventos como estábamos acostumbrados, por ejemplo, un partido de fútbol con el estadio a reventar, un auditorio lleno esperando un concierto, nuestras clases presenciales y muchas cosas más”.

Mientras tanto considera que la mejor forma es concentrar toda la frustración y las emociones negativas que nos ha traído esta pandemia realizando algo nuevo, empezando a hacer ejercicio, practicar un deporte o algún otro pasatiempo y con eso reducir todos los sentimientos negativos que a veces nos invaden.

Por otro lado, David ha buscado cosas que le relajen, como leer, dibujar, hablar con sus amigos por videollamada, convivir más con su familia, ver series o películas, entre otras cosas, y todo eso le ha ayudado a combatir la tristeza y a veces la desesperación por no poder salir.

 Finalmente, piensa que para apoyarse entre universitarios “una de las mejores soluciones es la de utilizar las reuniones virtuales, los mensajes, correos o cualquier medio de comunicación, ya que es una forma de hablar con los amigos o los docentes como se solía hacer antes, sobre distintos temas, expresar los problemas y buscarles una solución; si bien no es lo mismo, es una forma de estar ‘más cerca’, pues mantenerse en contacto con otras personas nos ayuda a hacer más leve y llevadero este confinamiento”.

Lili Wences