Entrar a la Facultad de Medicina de la UNAM ha sido un sueño para muchos, por lo que una de las opciones para poder formar parte de esta institución es a través del examen de admisión, y este año la generación 2023 recibió a cuatro de los aspirantes que obtuvieron 119 aciertos de 120 posibles, puntaje casi perfecto que sólo lograron seis personas en toda la Universidad.

“Mientras estudiaba la carrera de Odontología, me interesé mucho en las áreas médicas, por lo que creí que podría destacar siendo médico cirujano, así que decidí presentar el examen y mi preparación fue muy difícil, tuve que estudiar siete meses todos los días por aproximadamente unas 10 horas”, comentó Vidal Efrén Reyes Rodríguez, quien inició su segunda carrera.

También indicó que el cuerpo humano le parece muy interesante, por lo que fue una motivación más para estudiar Medicina, y cuando vio que había sido seleccionado sintió mucha emoción, pues “una parte de mí sabía que me iba a quedar, pero igual estaba ese miedo de que probablemente no lo lograría, así que estuve muy contento”, expresó.

Asimismo, recordó que el día del examen estaba muy nervioso, pero le dio tranquilidad el haberse preparado bastante, por lo que recomendó a los futuros aspirantes estudiar mucho y más si es para alguna carrera de alta demanda.

“La Facultad me parece asombrosa, es muy bonita y grande, espero que me forme como un buen médico cirujano para desempeñarme muy bien con los pacientes”, señaló Vidal.

Andrea Guadalupe Hernández Hernández, originaria de Aguascalientes, comentó que cuando comenzó a prepararse para el examen estaba cursando el primer semestre en una Ingeniería de la Universidad Autónoma Chapingo, “pero no me sentía atraída a la carrera y decidí solicitar un periodo de baja temporal para intentar nuevamente hacer el examen a la UNAM, ya que en el concurso del 2022 intenté ingresar pero no fui seleccionada, así que descargué mucho material que encontré en Internet, comencé a prepararme con temas que me parecían que eran muy tediosos y no me gustaban, después conocí un curso y ahí me orientaron en varios temas”.

Así, expresó que su interés por estudiar Medicina surgió porque “desde muy pequeña acudí a clínicas de salud mental por diversos problemas, entonces siempre me ha llamado la atención conocer qué es lo que pasa en mi mente y, gracias a que conozco esas cosas, espero poder generar más conocimiento que ayude a otras personas”.

Hasta el momento, la experiencia de Andrea en sus primeros días como universitaria ha sido bastante emocionante, pues “la Universidad es inmensa, me da mucha emoción y curiosidad estar viendo todos los espacios que nos ofrecen: las bibliotecas, los museos, todos los jardines. Cuando conocí la Facultad de Medicina me enamoré de sus instalaciones, entonces estoy emocionada y con entusiasmo de iniciar esta nueva etapa de mi vida”.

También mencionó que espera adquirir los conocimientos necesarios que le permitan formarse como una médica de calidad, que tenga ética profesional y compromiso con los pacientes, pues le gustaría especializarse en Psiquiatría o Neurología para desarrollarse en la investigación.

“Yo les recomiendo que se preparen con todo el tiempo de anticipación posible porque el temario es bastante extenso y pues es necesario verlo poco a poco para que no se presionen tanto y puedan seguir teniendo sus actividades recreativas, familiares, con amigos y eso les va ayudar a motivar a seguir adelante en el estudio, porque cuando te concentras en estar estudiando hay un punto donde ya no sientes ganas de seguir y se necesitan otros factores en la vida para continuar”, puntualizó Andrea.

Por su parte, Emilio Valentino Ordoñez Rosas, egresado del Centro Universitario México, recordó que “a la par de que estaba estudiando el bachillerato, repasaba libros, guías, utilicé la guía enviada por la UNAM, y como dos meses antes del examen tomé un curso, por lo que mi preparación inició desde que salió la convocatoria, es decir, fueron unos cinco o seis meses de estudio”.

Valentino consideró que al momento de presentar su examen, “estaba un poco confiado, aunque los nervios no se quitan, por lo que ese día tenía muchos sentimientos encontrados, en primera iba alegre de que ya por fin era el examen y emocionado por hacerlo, pero a la vez nervioso de que un mal resultado haría no poder quedarme”.

Para Valentino, sus primeros días en la Facultad de Medicina “han sido muy padres, sobre todo porque en la visita guiada de integración nos enseñaron todas las instalaciones y son muy bonitas tanto las académicas como las culturales, espero tener una enseñanza de gran calidad y poder emplearla al cien”.

Asimismo, mencionó que aspira poder egresar como un médico cirujano de excelencia y a futuro hacer un posgrado, ya sea una especialidad en Cardiología o Neurología, o una maestría o doctorado.

“Yo recomiendo que estudien desde antes, esto no es algo que se va a aprender en dos o tres semanas, necesitan mucho tiempo de preparación y dedicarle varias horas al día”, concluyó Valentino.

Fotografías: Adrián Álvarez

En su oportunidad, Karla Naomi Ramírez Guzmán, egresada de la preparatoria oficial número 100 de Texcoco, dijo que el método que utilizó para estudiar el año pasado fue autodidacta: “Bajé guías y todo lo necesario para resolver, pero no me quedé, por lo que en esta vuelta seguí con el mismo material, sólo que ahora acudí con maestros particulares que me fueron guiando y ayudando en los temas más extensos para poder prepararme mejor”.

“El día del examen sentí emoción pero también miedo de ver todas las preguntas, por una parte sabía que me había preparado, pero por otro lado estaba con la incertidumbre, pero al final todo salió bien”, agregó Naomi.

También compartió su método de estudio: “Estudiaba cuatro horas diarias, en esos ratos apagaba el teléfono, me encerraba en mi cuarto, si tenía alguna clase con algún maestro acudía, pero de igual manera me desconectaba de todo completamente, sin música, ni nada. Eso era de lunes a viernes y los sábados y domingos hacía lo mismo, sólo que si podía le aumentaba un poco más de tiempo”.

Desde que era pequeña siempre quise ser doctora, me gusta mucho ayudar a las personas, especialmente a las mujeres, por lo que en lo personal espero especializarme en Ginecología”, agregó.

Así, aconsejó a los futuros aspirantes a ingresar a que “nunca se rindan, aprovechen todas las oportunidades que les ofrecen, así sea lo más mínimo ustedes tómenlo, valórenlo y esfuércense mucho, al final de cuentas hay tiempo para todo”.

Karen Hernández y Víctor Enrimar