
Sandra Lisbeth Isidro Alonso, alumna de la Licenciatura de Médico Cirujano
Acabo de terminar el cuarto año de Medicina. A través de este escrito quiero compartir mi experiencia en el Hospital General de Zona-2A Troncoso, especialmente en la rotación con la doctora Raquel Galván. Al principio, todos teníamos miedo porque se decía que era una doctora muy exigente y estricta. Nos pedía llegar más temprano a nuestra rotación, estudiar a diario y responder sus preguntas, ya que, si nos quedábamos callados, nos ignoraba.
Empezamos la semana con mucho temor, pero la verdad es que la doctora Galván es increíble. Se preocupa mucho por sus pacientes y se esfuerza en brindar una consulta de calidad. Sinceramente, me encantó rotar con ella. Nos explicaba todo muy bien, incluso usando dibujos para cada padecimiento que veíamos, y al final de cada consulta nos daba mucha retroalimentación. Al hablar más con ella, nos contó que durante su carrera enfrentó tiempos difíciles, pero nunca se rindió y estudió mucho para sobresalir por su propio esfuerzo. Realmente, su historia es muy inspiradora.
En este momento, tengo sentimientos encontrados respecto a la especialidad de Cirugía general y Coloproctología. No me gustan los órganos macizos, como el hígado, páncreas, bazo y riñones, pero me atrae mucho el estudio del esófago, estómago, intestino delgado y grueso. Sé que quiero hacer una especialidad quirúrgica, pero no en México, por lo que quiero esforzarme mucho para lograrlo.