“En las mujeres adultas mayores se ha encontrado o se estima a nivel mundial una prevalencia de eventos de violencia que oscila entre el 14.8% y el 23.7%. Sin embargo, el porcentaje de esta violencia, y de la violencia tanto familiar como la violencia íntima de pareja puede duplicarse o se duplica en el caso de las mujeres con discapacidad”, indicó la doctora Martha Liliana Giraldo Rodríguez, profesora de asignatura de posgrado en la UNAM e investigadora del Instituto Nacional de Geriatría.

En el Seminario Permanente de Género en Salud de agosto, organizada por el Programa de Estudios de Género en Salud (PEGeS) del Departamento de Salud Pública y realizada en el marco del 28 de agosto que es el Día Nacional de las y los Abuelos, la ponente presentó el tema “Violencia a lo largo de la vida y sus efectos en la salud y discapacidad. El caso de las mujeres adultas mayores”, afirmando que la violencia de pareja puede persistir hasta la vejez, “porque casi siempre las investigaciones se truncaban hasta las mujeres de 60 años cuando se investiga violencia de género. Pero lo que hemos comenzado a mostrar y ser consistentes en esto es que la violencia de pareja puede ir hasta etapas muy tardías de la vida.” 

En la sesión transmitida por Facebook https://www.facebook.com/100064726957259/videos/24204781985838060 y YouTube, https://www.youtube.com/watch?v=WFBoBQTsxWE&t=1093s   moderada por la doctora Luz María Angela Moreno Tetlacuilo, fundadora del PEGeS, la doctora Giraldo indicó que “las mujeres también sufren violencia a manos de otros miembros de la familia, no solamente de la pareja. Y ahí comenzamos a ver una cuestión de revictimización que se repite a lo largo de la vida y lo que cambia es la persona que ejerce la violencia hacia la mujer, es decir, mujeres que sufrieron maltrato infantil por parte de los padres, de los tíos o de otros familiares, luego sufren más violencia íntima de pareja y cuando llegan a la vejez sufren violencia por parte de otros familiares”.

Finalmente, la ponente consideró que “urgen leyes con perspectiva interseccional que integren género, edad y discapacidad con un enfoque de curso de vida, no acciones aisladas. Se necesita capacitación urgente para profesionales de salud y justicia en detección de violencia en personas con discapacidad, así como servicios accesibles”.

La maestra Samantha Flores Rodríguez moderó la sesión de preguntas y respuestas al final de la conferencia.

Miguel Garduño