El pasado 30 de octubre, en el marco del Día de Muertos, Don Epitafio, encarnado en una mojiganga de tres metros, arreó a sus difuntos por el camino de los muertos a través de siete museos del Centro histórico: Palacio de la Escuela de Medicina, Museo de la Mujer, Museo Numismático Nacional, Museo de las Constituciones, Sinagoga Histórica Justo sierra, Colegio de San Ildefonso y Centro Cultural del México Contemporáneo.

Los asistentes se dieron cita a las 16 horas en el Palacio, en donde escucharon los primeros epitafios dedicados al antiguo Palacio de la Inquisición y a Manuel Acuña en voz de cuatro actores de la Compañía de Teatro Fénix NovoHispano. Al concluir, todos emprendieron el camino de los muertos acompañados por el grupo Lowen y su música celta.

Una vez terminado el itinerario por los siete museos, los que todavía contaron con aliento se incorporaron a Noche de vida, vida de noche, en el Palacio de la Escuela de Medicina.

Ahí, los asistentes hicieron un último recorrido hasta finalizar en un concierto del Grupo Klezgulash.

Eric Ramírez