“Muchos de ustedes imaginaron este momento desde niños, algunos lo decidieron en otro momento de la juventud,  siempre lo quisieron y hoy lograron ser médicos. Oficialmente ya tienen el título que los ostenta como tal”, celebró el doctor Germán Fajardo Dolci, director de la Facultad de Medicina, durante la Ceremonia de Entrega de Títulos de Médico Cirujano y Medalla “Gabino Barreda”, realizada en el auditorio “Dr. Raoul Fournier Villada”, los días 20, 21 y 22 de mayo.

Asimismo, resaltó que el 63 por ciento de los egresados en esta ceremonia son mujeres: “Hace 132 años el porcentaje era cero (de mujeres egresadas). Cambia el mundo todos los días y ustedes tienen una perspectiva diferente a siete años de haber iniciado la Licenciatura, esto habla de la velocidad en la que el mundo va cambiando. Siempre pensamos que la salud digital sería algo del futuro y ya es algo del presente”, expresó.

Por su parte, el doctor  Rubén Argüero Sánchez, jefe del Departamento de Cirugía, destacó el compromiso que se necesita para ser médico e invitó a los graduados a asumir el reto con responsabilidad y con pasión por la profesión.

“¿Qué significa ser médico? El privilegio y la oportunidad de hacer algo en beneficio de quien más lo requiere. El consultorio es un lugar donde se piensa que lo más importante es que el paciente salga con una receta; pero no, lo más significativo es saber escuchar, aconsejar y acompañar a la familia”, manifestó.

Por otro lado, la doctora Irene Durante Montiel, secretaria General, agradeció a los familiares por su apoyo y felicitó a los egresados por haber llegado a la meta, invitándolos a ser responsables con su profesión.

“Ustedes han tenido el privilegio de conocer a la Facultad en lo más profundo de su ser. Representan la razón de ser de esta Universidad que tiene la obligación de sostener los ideales de la supremacía del espíritu, la cultura y la dignidad humana. Poseen la encomienda de conservar y elevar el prestigio logrado por todos aquellos que los antecedieron. Como médicos deberán enfrentar los retos que la salud del país les presente”, indicó.

Les recordó que su profesión va de la mano con el dolor y la vida, para mencionar el fallecimiento de la alumna Abigail Garduño Rodríguez; mientras el doctor Fajardo Dolci otorgó un reconocimiento a sus familiares presentes.

Por su parte, la doctora Rosalinda Guevara Guzmán, jefa de la División de Investigación, recalcó la importancia de seguir teniendo metas y los invitó a seguir superándose día a día, en su vida profesional, académica y personal.

 “Creo que la posibilidad de ver realizados nuestros sueños es lo que hace interesante y le da sentido a nuestra labor como médicos. Confiamos en que los egresados de nuestras aulas, los presentes y futuros, determinarán el progreso de la Medicina mexicana, en la que seguramente dejarán su huella y ampliarán los caminos, y con el mismo ánimo esperamos que continúen acercándose a esta institución que siempre será su alma máter”, afirmó.

En tanto, recibieron la Medalla “Gabino Barreda”, concedida al promedio más alto de cada carrera, el licenciado en Investigación Biomédica Básica Diego Pérez Vázquez y el médico cirujano Marco Aurelio Tapia Maltos.

“Mis más sinceras felicitaciones a todos por el honor académico que hoy nos reúne. Terminar una carrera universitaria no es fácil y ahora podemos ver el largo camino que hemos hecho. A lo largo de estos años hemos aprendido y transmitido cúmulos de conocimientos que nos permitirán mejorar personal y profesionalmente”, resaltó Diego Pérez.

A su vez, Marco Tapia consideró que “como médicos tenemos obligaciones y se espera mucho de nosotros, nuestros errores cuestan vidas y por ello debemos trabajar para evitarlos. Nuestra labor implica vivir para los demás, no obstante también tenemos que poder vivir nosotros mismos”.