Cada año se pierden 400 millones de días laborables por enfermedades asociadas al sobrepeso y obesidad.
“Un empleado estará mejor o peor preparado para enfrentar las condiciones adversas del trabajo dependiendo de la satisfacción de sus necesidades económicas, familiares y de seguridad. En condiciones normales el cuerpo trabaja de manera eficiente, pero puede ser vulnerado por contextos ambientales como el estrés”, afirmó la doctora Rebeca Navarro Cruz, especialista en Medicina del Trabajo durante la sesión 189 del Seminario Permanente de Salud en el Trabajo.
A la fecha, la especialista ha identificado la mala alimentación, el sedentarismo, el tabaco y el alcohol como los factores de riesgo más importantes a tomar en cuenta, pues traen consigo enfermedades que alteran el rendimiento de los trabajadores.
Recomendó a los futuros médicos que laboren en empresas, planear estrategias de salud adaptables a cualquier presupuesto, diseñar campañas de prevención y trabajar en el ambiente laboral. “Los beneficios de una apuesta de trabajo saludable son la reducción de accidentes y enfermedades, ya que se mejora el bienestar, la retención, la capacidad de sobreponerse al estrés y un mayor compromiso de los empleados”, aseguró.
Eric Ramirez
