El 18 de agosto, el Seminario de Estudios sobre la Globalidad (SEG) de la Facultad de Medicina de la UNAM, la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Facultades y Escuelas de Medicina (ALAFEM) y la Unión de Universidades de América Latina y el Caribe (UDUAL) realizaron el foro “Desafíos educativos en cuidados paliativos”.

En el evento, moderado por la doctora Nayely Salazar Trujillo y transmitido por Facebook Live y YouTube, el doctor Germán Fajardo Dolci, Director de la Facultad de Medicina y Presidente de ALAFEM/UDUAL, mencionó que “la formación de los futuros profesionales en cuidados paliativos es función de las universidades, por lo que es importante que en un futuro cercano se puedan incorporar asignaturas de esta materia a los planes y programas de estudio para que se aprenda no sólo de manera teórica en una asignatura, sino también en la práctica cotidiana”.

“De igual forma, hay que capacitar e informar a los docentes, porque a veces no tenemos al profesional que pueda enseñar y transmitir las habilidades que se requieren, y por eso debemos incorporar diferentes especialidades para formar a los profesores que van a enseñar a nuestros alumnos diferentes competencias, pues México y Latinoamérica necesitan personal calificado, por lo que esto es un tema del que tenemos que hablar y trabajar mucho más”, indicó el doctor Fajardo Dolci.

Por su parte, el doctor Roberto Escalante Semerena, Secretario Ejecutivo de la UDUAL, resaltó que “necesitamos personal, jóvenes médicos que estén y sepan del asunto, que hagan un trabajo de gran calidad médica, humana, psicológica y social”.

“A mí me parece muy bien que la ALAFEM esté involucrada en este foro para discutir todos los temas relacionados con la educación de los jóvenes médicos que tienen una vocación respecto de los cuidados paliativos, por eso necesitamos ser muy agudos y precisos en todos los asuntos que contengan los cursos y especializaciones”, comentó el doctor Escalante Semerena.

La doctora Luz Adriana Templos Esteban, Profesora Titular del Curso de Alta Especialidad en Medicina Paliativa del Hospital General “Dr. Manuel Gea González”, habló de la importancia de la educación y formación especializada en Medicina Paliativa, pues es “un área que ha crecido en México y América Latina, por lo que ha empezado a ser reconocida por las diferentes autoridades y organismos nacionales e internacionales bajo programas estructurados, y eso da pie a que se esté generando nuevo conocimiento sólido relacionado al campo”.

Asimismo, enfatizó en la “necesidad de mejorar las habilidades prácticas en enfermería, atención de demencia, apoyo al duelo, comunicación y formación, pues es importante considerar el contexto físico, espiritual, social y cultural del paciente y su familia cuando se enfrenta un proceso de final de vida y acercamiento a la muerte, por lo que se requiere capacitar adecuadamente a los recursos humanos especializados para lograr esta tarea”.

Por su parte, la doctora María Elena Medina-Mora Icaza, Directora de la Facultad de Psicología de la UNAM y Coordinadora del SEG, resaltó la importancia del autocuidado y la salud mental en los equipos de cuidados paliativos y la necesidad de incorporar en la formación de los médicos el anteponer su bienestar como parte importante, porque “la calidad de vida del cuidador tiene implicaciones personales y profesionales en su capacidad para promover la calidad de vida para los pacientes y sus familias”.

Así, para lograr el bienestar de los estudiantes, la doctora Medina-Mora Icaza consideró que “habría que planear el autocuidado, empezando por una evaluación de la situación actual; hacer una reflexión sobre los valores personales y motivación para el autocuidado; considerar las redes sociales y profesionales, y la armonía trabajo-vida; identificar los estresores que cuestionan nuestro bienestar; establecer metas para el propio bienestar; considerar la eficacia personal; y establecer un compromiso para la acción”.

El doctor Jesús Salvador Valencia Sánchez, Coordinador de los Cursos de Posgrado de Alta Especialidad en Medicina (PAEM) de la Facultad de Medicina, habló de la experiencia y los resultados de la formación especializada en Medicina Paliativa y mostró el plan maestro que crearon para la reestructuración de los PAEM, e informó que por el momento están en “la segunda etapa del Programa Único del Posgrado de Alta Especialidad en Medicina del Dolor y Paliativa, el cual tiene como objetivo que, al final de su formación, los médicos realicen actividades profesionales confiables”.

Como conclusión, el doctor Valencia Sánchez enfatizó que “la conformación y desarrollo de los PAEM es un proceso dinámico que requiere de cambios e innovaciones para mejorar los programas, ya que los avances en el conocimiento científico y tecnológico, en conjunto con los cambios demográficos y transiciones epidemiológicas, exigen una permanente adaptación, para formar especialistas capaces de atender los problemas de salud”.

En su oportunidad, la doctora Argimira Vianey Barona Núñez, Coordinadora de Investigación del Departamento de Integración de Ciencias Médicas de la Facultad de Medicina, mostró la simulación clínica como herramienta en la formación en cuidados paliativos, la cual “es una estrategia de enseñanza-aprendizaje que permite reemplazar al paciente, amplificar un cuadro clínico y mejorar los ambientes para que los estudiantes de cualquier área de la salud experimenten situaciones muy parecidas a lo real de manera controlada, segura y utilizando la tecnología”.

También resaltó que dentro de los beneficios que tiene el que los estudiantes usen la simulación clínica en su formación en cuidados paliativos es que “permite desarrollar o mejorar los conocimientos, habilidades, aptitudes y actitudes; aprenden del error; favorece la autoreflexión sobre su desempeño; promueve el trabajo colaborativo; y permite vivir experiencias que no se pueden vivir en la vida real”.

Panel de expertos

Seis expertos aportaron sus conocimientos sobre los “Retos en la formación y educación de los Cuidados Paliativos”, panel moderado por la maestra Susana Ruiz.

La doctora Patricia Bonilla Sierra, Presidenta de la Asociación Latinoamericana de Cuidados Paliativos, indicó que se han incrementado los países que reconocen los cuidados paliativos como una especialidad médica, “pero el trabajo que tenemos que hacer en Latinoamérica sigue siendo intenso, depende del interés de las facultades para que incluyan los programas de cuidados paliativos como materia obligatoria, y eso requiere de una modificación curricular”.

Ante esta situación, la doctora Bonilla Sierra expresó que una opción a corto plazo es implementar en las universidades de Latinoamérica una materia optativa de cuidados paliativos, mientras que aparecen las reformas curriculares que la incluyan como materia obligatoria.    

Por su parte, el doctor Juan José Sánchez Sosa, Profesor Emérito de la Facultad de Psicología de la UNAM, habló de la formación en cuidados paliativos desde la óptica del comportamiento, analizando a los pacientes, los cuidadores y médicos con intervenciones breves, focalizadas, directivas, basadas en mecanismos naturales, derivadas de investigación científica y evidencia clínica, con ética y respeto.

Asimismo, mencionó que los médicos se encargan del proceso de designación como caso paliativo, el personal de enfermería hace la instrumentación de directrices en el hospital, los trabajadores sociales designan las necesidades socioeconómicas y la familia es la cuidadora primaria.

El doctor Javier Santacruz Varela, Secretario General de la ALAFEM, mostró el trabajo que han realizado para la incorporación de los cuidados paliativos en la educación de los estudiantes de Medicina, ya que “el envejecimiento de la población y la frecuencia de las enfermedades crónicas continúa aumentando, de modo que hay una mayor necesidad de profesionales especializados”.

«Los cuidados paliativos requieren trabajo en equipo, por ello la enseñanza debe ser multidisciplinaria y se debe promover el trabajo interprofesional durante el pregrado para aprender a trabajar en grupo», expresó el doctor Santacruz Varela.

La doctora Olivia Sanhueza Alvarado, Presidenta de la Asociación Latinoamericana de Escuelas y Facultades de Enfermería, presentó una propuesta que reflexiona sobre la interdisciplina y la multidimensionalidad del proceso que acontece en el individuo que sufre la enfermedad junto a su familia, proceso que involucra lo físico, psicológico, social y espiritual.

Asimismo, mencionó que debe integrarse en el contexto de la atención primaria de salud un sistema de asistencia paliativa sostenible, de calidad adecuada, accesible y domiciliaria al usuario y familia que lo requiera.

Por su parte, la maestra Norma Cruz Maldonado, de la Escuela Nacional de Trabajo Social de la UNAM, resaltó la importancia de su área, pues aunque no tienen una especialización en cuidados paliativos, “los estudiantes son formados para responder a ciertas demandas de carácter social y pueden insertarse en diferentes áreas de intervención, y la mayoría de trabajadores sociales ejercen en instancias de salud”.

«Cada una de las profesiones tiene una intervención particular en los cuidados paliativos; si bien nos interesa el paciente, la familia también es importante, y el trabajo social es el encargado de mapear estas necesidades sociales de los pacientes», indicó la maestra Cruz Maldonado.

El panel concluyó con la participación de la doctora Elvira Llaca García, Coordinadora de la Maestría en Bioética de la Universidad Anáhuac, quien enfatizó que “la necesidad de este tipo de cursos es muy grande porque los médicos y estudiantes deben saber paliar desde sus especialidades para formar equipos multidisciplinarios y, así, las habilidades puedan ser transversales”.

«Desde el año 2016 tenemos un programa de cuidados paliativos y hemos tratado de ir a todos los niveles multidisciplinarios, no nada más hacia los médicos, también nos concentramos en los cuidadores primarios o acompañantes, y hemos tenido una gran respuesta, hemos notado que hay necesidad de estos cursos», puntualizó la doctora Llaca García.

 Karen Hernández y Vicky Enrimar