A fin de profundizar en el análisis de investigaciones con perspectiva de género relacionadas con la salud desde la visión de diversas áreas médicas y científicas, y analizar las desigualdades en la representación de hombres y mujeres en las estructuras institucionales académicas y científicas vinculadas con la salud, los días 10 y 11 de septiembre se realizó el Primer Congreso Internacional Ciencia, Salud y Género.

La doctora Irene Durante Montiel, secretaria General de la Facultad de Medicina y presidenta honoraria del Congreso, recordó que las primeras agrupaciones científicas se crearon hace más de 300 años, sin embargo, fue hasta 1979 que la Academia de Ciencias de Francia aceptó a la primera mujer, Yvonne Choquet-Bruhat. Reconoció que, aunque se ha visto un avance en el papel de la mujer en las ciencias de la salud, todavía no tiene las mismas opciones de desarrollo laboral, por lo que instó a asumir el reto y a fortalecerlo. “El hablar de ello es el primer paso en un largo camino para hacer historia”.

Por su parte, el doctor William Lee Alardín, coordinador de la Investigación Científica de la UNAM, resaltó que el tema de salud y género “toca cuestiones de derechos humanos básicos. Fomentar la diversidad desde el inicio, como un eje de decisión consciente, puede ser muy útil”.

Necesario impulsar políticas públicas con perspectiva de género

Durante el panel “La perspectiva de género en la formación y atención de la salud”, la doctora Zulema Mosri Gutiérrez, magistrada de la Sala Superior del Tribunal Federal de Justicia Administrativa, resaltó que en el sistema jurídico existe un marco sólido que procura la protección y defensa de los derechos de las mujeres, por lo que el desafío es diseñar políticas públicas que incorporen la perspectiva de género y la interculturalidad en la formación del personal médico y de los que laboran en el sector, así como crear y fortalecer los protocolos de prevención y atención a víctimas de violencia.

En su intervención, la doctora Mónica González Contró, abogada General de la máxima casa de estudios, informó que desde que se implementó el Protocolo para la Atención de Casos
de Violencia de Género en la UNAM (en 2016) se han recibido 484 quejas, en comparación con las 396 que se hicieron en el periodo 2003-2016. “No es que haya aumentado la violencia de género, sino que se ha visibilizado, lo cual es una buena noticia”, consideró.

La doctora María de los Ángeles Fernández Altuna, secretaria de Servicios Escolares de la Facultad de Medicina, informó que las mujeres representan el 63 por ciento de la matrícula de pregrado, el 50 por ciento de los residentes, el 44 por ciento de los profesores y el 64 por ciento de los jefes de departamento. “Es un hecho que cada vez se gradúan más mujeres en Medicina, pero aún hay diferencias salariales y en oportunidades de trabajo”, indicó al señalar que es necesario que existan políticas públicas en materia laboral y social.

Atender la salud mental de niñas y jóvenes es crucial en su desarrollo

“Generalmente, primero se presentan los trastornos mentales y luego el abuso de sustancias. Mientras que en el hombre el riesgo de desarrollar dependencia es de 2.5 veces, en la mujer aumenta hasta siete veces”, indicó la doctora María Elena Medina-Mora Icaza, directora General del Instituto Nacional de Psiquiatría “Ramón de la Fuente Muñiz”, al explicar cómo el ambiente y los trastornos mentales influyen en el desarrollo de las mujeres y niñas.

A las mujeres les lleva menos tiempo desarrollar dependencia y enfermedad, es decir, tienen una vulnerabilidad biológica mayor, con importantes consecuencias sociales. “Aunque ante las adicciones hombres y mujeres se comportan igual, tienen más rechazo y mayores pérdidas que los varones en la misma condición”, aseguró.

De acuerdo con lo expuesto por la doctora Medina-Mora Icaza, una joven que padece depresión y no recibe tratamiento tiene 18 veces más riesgo de desarrollar un problema de adicción, 3.2 veces más riesgo de no terminar la escuela, y 7.6 más riesgo de ser abusada sexualmente y repetir estos ciclos.

Por ello, destacó la importancia de garantizar a las niñas y jóvenes de escasos recursos los servicios integrales que atiendan sus necesidades específicas. “Debemos pensar cómo podríamos lograr menos violencia y darles las herramientas para protegerse de los riesgos, y que esto se traduzca en oportunidades”.

La promoción de la salud implica entender los determinantes sociales

“La salud tiene que entenderse como algo que tiene determinantes sociales y además forma parte de ellos”, dijo el doctor Pablo Kuri Morales, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, en representación del doctor José Narro Robles, titular de la Secretaría de Salud.

Durante su conferencia magistral, mencionó que es necesario tomar en consideración factores como vivienda, medio ambiente y género en la construcción de políticas públicas. “No hay duda de que si mejoramos el empleo, la vivienda y la educación, entonces mejorará la salud. Estos determinantes sociales han hecho que haya procesos de cambio importantes”.

Explicó que no hay distinción de género en las tres primeras causas de muerte en México (diabetes, enfermedades no transmisibles y cardiopatías), sin embargo, el consumo
de sustancias y las agresiones son la cuarta y quinta causas de mortalidad en hombres; mientras que en las mujeres son los tumores malignos y los desordenes músculo-esqueléticos. Lo anterior es una muestra de cómo el factor social del género marca un cambio en la salud.

El género puede influir en la salud

“En una sociedad machista todos somos machos, hasta las mujeres y todos salimos perdiendo, hasta los hombres”, dijo la doctora Guadalupe García de la Torre, jefa del Departamento de Salud Pública de la Facultad de Medicina.

Explicó que las diferencias de género en la crianza son un factor que debe ser considerado, pues influye en el cuidado de la salud. “A los hombres se les enseña a no cuidarse y culturalmente se juzga la autoexploración en la mujer”, recalcó.

La especialista propuso estratificar el análisis de los datos estadísticos o epidemiológicos por la variable sexo, para generar hipótesis de asociación con el género.

Conclusiones

Entre los acuerdos y conclusiones a los que llegaron los participantes del Congreso estuvieron el elaborar estrategias que impulsen el desarrollo de las políticas con perspectiva de género en la salud, incluir dicha perspectiva en las matrículas de las diversas carreras universitarias relacionadas con la salud, así como en las evaluaciones de los exámenes de residencias médicas.

En la clausura, la doctora Martha Pérez Armendariz, presidenta del Congreso, consideró que éste ha sido un paso importante al conjuntar investigadores en el campo emergente de los estudios de dimensión y perspectiva de género en el área de las ciencias de la salud.

El evento reunió a más de 50 especialistas de la máxima casa de estudios, de instituciones académicas y de salud nacionales y extranjeras; fue organizado por la Facultad de Medicina, la Coordinación de la Investigación Científica, la Dirección General de Divulgación de la Ciencia y el Grupo Mujer y Ciencia UNAM, así como por el Foro Consultivo Científico y Tecnológico, y la Federación Mexicana de Mujeres Universitarias.

Lili Wences, Mariana Montiel y Samedi Aguirre