El libro La Escuela Nacional de Medicina 1833-1910, de la doctora Martha Eugenia Rodríguez Pérez, reúne los antecedentes más importantes de esta institución; además, analiza su desarrollo y evolución a través del tiempo. La reedición de la obra, a cargo del Departamento de Historia y Filosofía de la Medicina (DHFM) de la Facultad, servirá al trabajo que realizan investigadores y alumnos de posgrado.

Además, el texto forma parte del material complementario de la Licenciatura de Médico Cirujano, pues se especializa en el devenir de la educación médica basado en fuentes primarias, las cuales están fundamentadas en el Archivo Histórico de la Facultad de Medicina de la UNAM.

“El libro analiza a la institución educativa como sujeto de estudio, que formó no sólo a los futuros médicos, sino también a los farmacéuticos y a las parteras, además de examinar a los dentistas y a los flebotomianos, quienes practicaban sangrías y componían huesos”, explicó la doctora Rodríguez Pérez, jefa del DHFM.

A lo largo de 220 páginas, divididas en 15 capítulos, se narra la fundación del Establecimiento de Ciencias Médicas, las carreras vinculadas a la Escuela Nacional de Medicina (ENM), la provisión de cátedras, las inscripciones, el alojamiento para estudiantes en las propias instalaciones, las clases teóricas y prácticas, los más destacados cambios curriculares, las instituciones que apoyaron la enseñanza de la Medicina, evaluaciones, tesis y el inicio de las especialidades.

“Es una publicación muy rica en temas; nos informa sobre la Escuela propiamente dicha, sus planes de estudio, personajes, directores, profesores y alumnos. Nos muestra la legitimación de las disciplinas sanitarias, su institucionalización y profesionalización en México”. Dra. Martha Eugenia Rodríguez.

Asimismo, se presenta a los académicos de la ENM como profesionales que podían desenvolverse en las aulas, anfiteatros, laboratorios e institutos de investigación del siglo XIX. “La élite médica era reducida, pero trabajaba intensamente en la apropiación y generación de conocimientos. Así, en la ENM se aprecia la fusión de saberes, el de la clínica francesa y el de la escuela alemana con las aportaciones de los médicos mexicanos. Inicialmente sólo se leyeron libros de autores extranjeros, y para la segunda mitad del siglo XIX los médicos mexicanos empezaron a elaborar textos para la docencia”, comentó la autora.

El libro se publicó en 2008, pero pronto se agotó y sólo podía ser consultado en la Biblioteca “Nicolás León”. La demanda, por parte de investigadores y estudiantes de posgrado, incluso externos a la UNAM, hizo necesaria esta segunda edición que consta de 500 ejemplares y se puede adquirir en el Palacio de la Escuela de Medicina una vez que termine la contingencia.

Eric Ramírez