La influenza es una enfermedad aguda de las vías respiratorias que afecta a personas de cualquier edad y es causa de cifras alarmantes de morbilidad y mortalidad en el mundo. Tan sólo durante la pandemia de 1918 fallecieron más de 50 millones de personas.

A 100 años de este suceso, el Departamento de Salud Pública organizó un simposio para generar conciencia sobre esta enfermedad y lo que puede suceder si no se toman las medidas adecuadas.

“Hace escasos nueve años también tuvimos una pandemia de influenza, del tipo AH1N1. Seguramente casi todos podemos recordar cuál fue el impacto, cómo lo vivimos, pero justo este evento sirve para analizar qué aprendimos de ello, tener una visión de salud global y poder actuar con eficacia”, afirmó la doctora Irene Durante Montiel, secretaria General de la Facultad de Medicina, en la inauguración de la actividad académica dirigida a estudiantes de Medicina y profesionales de la salud.

Por su parte, la doctora Guadalupe García de la Torre, jefa del Departamento de Salud Pública, resaltó que es importante difundir los efectos que el virus de la influenza puede provocar a nivel individual, familiar y social.

“Se cree que las intervenciones no farmacéuticas podrían ser el arma más importante para desacelerar la epidemia, mientras los sistemas de salud se organizan para conseguir vacunas o medicamentos. Señalar culpables y discriminarlos, por ejemplo, nunca ha ayudado; como tampoco ha hecho tratar de evitar el pavor de la población manteniéndola desinformada. En cambio, ha sido benéfico dar la alerta oportuna, proporcionar datos fidedignos a la comunidad internacional, realizar estudios epidemiológicos y fortalecer los servicios de salud”, consideró la doctora Ana Carrillo Farga, académica de dicho Departamento.

En el simposio se abordaron aspectos biológicos, históricos, sociales y de prevención, así como la importancia de la vacunación como una estrategia para romper la cadena de transmisión y protección de la población; además, cómo debe protegerse el personal de la salud en la atención de pacientes y por qué es relevante la vigilancia epidemiológica.

Participaron expertos del Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos, el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, así como de la Facultad de Medicina.

Como parte de la actividad, se aplicó una vacuna trivalente (A, B y estacional) a los asistentes e integrantes de la comunidad.

Lili Wences