La desnutrición y la obesidad están vinculadas a procesos económicos y a cambios en el estilo de vida, dando lugar a una dieta inadecuada y a enfermedades que, si no son tratadas, pueden provocar daños irreparables. En el caso de México, esta situación afecta más a mujeres debido a la desigualdad de género en materia de salud.

En el Seminario Permanente de Género y Salud, la maestra María del Carmen Iñarritu Pérez, Técnico Académico de la Facultad de Medicina de la UNAM, explicó que el término malnutrición se entiende como una carencia, exceso o desequilibrio de la ingesta de energía y/o nutrientes de una persona, abarcando dos grupos amplios de afecciones: la desnutrición y la obesidad.

La doctora Sara Elena Pérez Gil Romo, especialista en estudios de la mujer en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán” (INCMNSZ), destacó la importancia de reportar los problemas de salud de las mujeres desde una perspectiva de género para mejorar su atención.

Finalmente, la maestra Silvia Díez-Urdanivia Coria, investigadora del INCMNSZ, compartió su experiencia en el Centro de Capacitación Integral para Promotores Comunitarios, donde se encarga de empoderar a las mujeres de la Sierra Norte de Oaxaca con acciones de capacitación.

Samantha Cedeño