El 17 de mayo se conmemora el Día Mundial de la Hipertensión. Hasta hace poco se diagnosticaba con cifras de presión arterial iguales o mayores a 140/90 mmHg. Estos valores se redujeron a 130/80 mmHg, lo que representa un importante aumento en el número de casos.

Tan sólo en 2015 la Organización Mundial de la Salud estimaba que uno de cada cinco adultos en el mundo tenía hipertensión.

La fecha recuerda la necesidad de actuar antes de que el padecimiento aparezca, a través de cambios en el estilo de vida: llevar una dieta equilibrada, hacer ejercicio, evitar el consumo de alcohol y tabaco, y reducir la ingesta de sal.