Fue en la justa deportiva de México 68 cuando se hicieron por primera vez análisis de genética y antropología de los deportistas para investigar sus habilidades.

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Además de la disciplina y las jornadas exhaustas de entrenamiento, ¿los atletas de alto rendimiento tienen en sus genes algo extraordinario que los lleva a conseguir nuevos récords o hacer excelentes rutinas? Esta pregunta fue planteada en un proyecto encargado al doctor Alfonso León de Garay por el Comité Organizador de los Juegos Olímpicos realizados en México en 1968.

            “Querían saber si había determinantes genéticos que hicieran diferentes sus habilidades deportivas, por ejemplo, se decía que los corredores más rápidos eran negros y los mejores nadadores, blancos”, explicó la doctora Ana Barahona Echeverría, académica de la Facultad de Ciencias de la UNAM, durante la bienvenida a los alumnos de las licenciaturas en Investigación Biomédica Básica (LIBB) y de Médico Cirujano.

            El estudio, realizado en mil 275 atletas voluntarios, no encontró una relación concluyente entre los genes y las habilidades deportivas, pues hay factores psicológicos, sociológicos, económicos y hasta políticos que influyen; no obstante, las pruebas se siguieron aplicando hasta Sidney 2000, se dejaron de hacer por tres ediciones y se volvieron a realizar en Río 2016 con nuevos instrumentos.

En cuanto a las pruebas de sexo, éstas sólo se aplicaron a mujeres, y se les hicieron estudios cromosómicos para confirmar su género: “Nunca se dudaba de que un hombre fuera hombre, pero sí de una mujer; eso ocurre todavía en la actualidad”, expresó la también integrante de la Junta de Gobierno de la UNAM.

También, en 1968, se introdujeron las pruebas de dopaje: “Hay una anécdota respecto a que hay muchos récords de la época de la Guerra Fría que no se han roto, y la explicación que se da es que el bloque comunista dopaba a los competidores sin que se dieran cuenta”, recordó la bióloga experta en Historia y Filosofía.

En la ceremonia encabezada por el director, el doctor Germán Fajardo, estuvieron presentes los doctores Irene Durante, secretaria General; Ignacio Villalba, secretario de Planeación y Desarrollo Institucional; Arturo Espinosa, secretario del Consejo Técnico; Rosalinda Guevara, jefa de la División de Investigación, y Luis Antonio Mendoza, coordinador de la LIBB; así como los maestros Luis Arturo González, secretario Administrativo, y David Flores, coordinador de la Feria.

Lili Wences