“Si bien es cierto que por un lado ha aumentado el número de contagios por Ómicron, con el advenimiento de la vacuna y todas las estrategias implementadas a nivel nacional, se han reducido la estancia hospitalaria y el número de muertes”, afirmó el doctor Ricardo Valdés Castro, Jefe del Departamento de Epidemiología Hospitalaria y Control de Infecciones Nosocomiales del Hospital General “Dr. Manuel Gea Gónzalez”.
“El Ómicron es un virus RNA, con estructuras conformadas por proteínas, la más importante, la ‘proteína spike’, es prácticamente la estructura genómica del virus y es importante porque es la causante de que el virus pueda entrar a la célula humana”, compartió el especialista durante su ponencia en el Seminario Permanente de Salud Pública de la Facultad de Medicina de la UNAM, en la que abordó el panorama epidemiológico de la variante Ómicron a nivel nacional y en el Hospital Gea González.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, al 24 de febrero se reportaron 5 millones 473 mil 489 casos confirmados y 317 mil 303 defunciones. Dentro de todas las variantes, la que ha tenido la tasa de contagio más alta es la Ómicron, pero promediando todas se tiene una letalidad de 5.91, o bien, de cada 100 enfermos, aproximadamente seis fallecen, señaló el doctor Valdés Castro.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, en los 32 estados de la República Mexicana hay cinco variantes de SARS-CoV-2 que son de preocupación, dos son de interés en 29 estados, una es de monitoreo en cinco estados y 213 variantes en los 32 estados no tienen clasificación, lo que “prácticamente nos da pie a pensar que la pandemia no ha terminado y no va a terminar pronto”, mencionó el ponente.
Asimismo, el doctor Valdés Castro abordó el panorama epidemiológico en el Hospital Gea González e indicó que de cada 100 pacientes con enfermedad respiratoria viral, 16.2 presentaron SARS-CoV-2, y que a lo largo de las cuatro olas, la tendencia de defunciones fue a la baja con un total de 512.
Durante las primeras tres olas, apuntó, hubo aproximadamente una mujer por dos varones afectados, pero en la cuarta ola la tendencia se invirtió, pues por cada varón hubo dos mujeres. Los resultados finales apuntan a una tendencia balanceada con mil 625 casos de varones (50.8 por ciento) y mil 571 casos de mujeres (49.2 por ciento). En cuanto a edad, el mayor número de casos se presentó de los 25 años en adelante.
“En la primera y segunda ola los síntomas que prevalecieron fueron respiratorios del tracto bajo, sin embargo, en la tercera y cuarta ola, los síntomas ya no eran del tracto respiratorio inferior sino del superior; vemos la odinofagia, la cefalea y la tos como síntomas preponderantes en estos últimos meses”, dijo el doctor Valdés Castro.
Respecto de las estrategias preventivas que ha tomado el Hospital, el ponente enfatizó la importancia del lavado de manos en cinco momentos, así como la implementación de precauciones por contacto, vía aérea o por gotas, y recalcó la importancia de tener espacios con ventilación adecuada para reducir la carga viral.
Finalmente, el doctor Valdés Castro indicó que no hay indicios de que la pandemia termine pronto y que las variantes seguirán presentándose, por lo que es vital continuar con las medidas sanitarias y la vacunación.
Diego C. Alverdi