En el marco del Día Mundial sin Tabaco, el pasado 31 de mayo, la Facultad de Medicina de la UNAM celebró su primer aniversario de haber recibido el reconocimiento como “Espacio 100 por ciento Libre de Humo de Tabaco y Emisiones” con la entrega oficial de la placa por parte del Instituto para la Atención y Prevención de las Adicciones de la Ciudad de México (IAPA). Asimismo, el Departamento de Salud Pública (DSP) realizó una serie de ponencias bajo el lema “Protegiendo a la niñez de la industria del tabaco”, con el objetivo de reflexionar sobre el impacto devastador que el tabaquismo tiene en la sociedad.

En el auditorio “Dr. Fernando Ocaranza” y a través de Facebook Live, la doctora Ana Carolina Sepúlveda Vildósola, Directora de la Facultad de Medicina, indicó que “el tabaquismo constituye un problema de salud pública de enormes proporciones, cada año 8 millones de personas fallecen a causa de las numerosas enfermedades asociadas al consumo de tabaco. De estas muertes, 1.2 millones son fumadores pasivos, personas que nunca han encendido un cigarro pero que están expuestas al humo de otros. Además, cada año, 65 mil niños menores de 5 años mueren debido a las infecciones respiratorias causadas por la exposición al humo de segunda mano”.

También, recordó que el año pasado la Facultad recibió el reconocimiento como Espacio 100 por ciento Libre de Humo de Tabaco y Emisiones, por lo que “en este primer aniversario nos sentimos muy orgullosos de ser la primera Facultad de la UNAM que tiene este reconocimiento, esperamos servir de ejemplo para muchas otras entidades académicas y en un futuro cercano lograr una Universidad libre de humo de tabaco. Invito a toda nuestra comunidad a sumarse a esta distinción, enseñando con el ejemplo a cuidar de la salud propia y de los demás. Agradezco su atención y compromiso con esta importante lucha contra el tabaquismo”.

En su oportunidad, el doctor Ricardo Escamilla Santiago, Jefe del DSP, comentó que el tabaco es responsable de una gran cantidad de enfermedades y muertes que podrían evitarse, por lo cual es crucial continuar con la promoción de hábitos de vida saludables y espacios libres de humo: “En la Facultad de Medicina estamos comprometidos con la formación de profesionales de la salud que no sólo estén capacitados para tratar enfermedades, sino también sean defensores de la prevención y promotores de una vida libre de tabaco. Nuestros esfuerzos por crear un ambiente saludable son una muestra del compromiso que tenemos con la salud pública y el bienestar de nuestra comunidad”.

Asimismo, agradeció a la doctora Guadalupe Ponciano Rodríguez, Coordinadora del Programa de Investigación y Prevención del Tabaquismo (PIPT) de la Facultad, por su liderazgo y esfuerzo contra el tabaquismo, y señaló que “este reconocimiento no sólo es un honor, sino también un recordatorio de la responsabilidad que tenemos de mantener y promover estos estándares, es un llamado a todos para ser un ejemplo y modelo a seguir no sólo dentro de la Universidad, sino en nuestras vidas cotidianas”.

En el presídium, también estuvo la doctora Ponciano Rodríguez, y el doctor José Antonio Alcocer Sánchez, Director del IAPA.

Importancia de los espacios 100% libres de humo de tabaco y emisiones

El doctor Alcocer Sánchez mencionó que en México hay más de 15.6 millones de fumadores, siendo los jóvenes de 12 a 15 años de edad el grupo más vulnerable al tabaquismo. Explicó que un fumador típico aspira hasta 10 veces un cigarro en los escasos 5 minutos que dura encendido; por otro lado, hay fumadores pasivos, quienes no fuman, pero están expuestos al humo de tabaco ambiental, lo cual aumenta el riesgo de padecer cáncer de pulmón en aproximadamente un 20 por ciento; y existe el humo de tercera mano, que son los residuos químicos en las superficies del lugar donde se ha fumado, que pueden persistir mucho tiempo después de que ha desaparecido el humo.

Sin embargo, externó que el Gobierno de la República ha tomado acciones muy importantes en contra del tabaquismo, como la publicación del Reglamento de la Ley General para el Control del Tabaco, que contempla la prohibición de toda forma de publicidad, promoción y patrocinio del tabaco, incluida la exhibición directa de productos del tabaco en puntos de venta, así como la creación de espacios 100 por ciento libres de humo y emisiones en cualquier lugar de trabajo y centros de concurrencia colectiva como plazas, parques, playas y estadios: “Afortunadamente, se ha disminuido significativamente la exposición al humo, y todos estamos más conscientes del daño que este provoca”.

Deporte y tabaquismo: dos líneas paralelas

El licenciado José Manuel Arriaga Espinosa, responsable del Programa de Actividades Deportivas y Recreativas (PADyR) de la Facultad de Medicina, comentó que el deporte proporciona importantes beneficios para la salud y la calidad de vida, mientras que el tabaco genera un impacto negativo al introducir sustancias nocivas en el organismo. Por ejemplo, la nicotina libera sustancia estimulantes y neurodegenerativas que provocan el aumento de la frecuencia cardiaca y la presión arterial, lo que genera un mayor esfuerzo cardiaco; y el monóxido de carbono reduce la cantidad de oxígeno, haciendo que los músculos se fatiguen rápidamente y tarden más tiempo en recuperarse.

Así, señaló la necesidad de ser más conscientes sobre no fumar en áreas donde se practique deporte, especialmente para proteger a los atletas y a quienes disfruten de ejercitarse: “El deporte es un aliado para dejar de fumar. Si se mantiene este hábito, se podrá recuperar en gran medida la función pulmonar, mejorará la capacidad de la sangre para transportar oxígeno a los músculos, desaparecerá la carboxihemoglobina y, en general, habrá un mejor rendimiento deportivo. En el PADyR tenemos diferentes actividades, los invitamos a que se unan a realizar alguna con nosotros o en la Dirección General del Deporte Universitario de la UNAM”.

Reseña de actividades del PIPT en la Facultad de Medicina

La doctora Ponciano Rodríguez recordó que el 31 de mayo de 2000 inició la Clínica contra el Tabaquismo en la Facultad de Medicina, y cumplirá 25 años el siguiente año, cuyo objetivo era brindar ayuda profesional de alta calidad para promover y facilitar el abandono de la adicción al tabaco a través de tratamientos farmacológicos y psicológicos: “Comenzamos pensando en los universitarios. Sin embargo, abrimos a la población general porque nos solicitaban ayuda; fue así como surgió el PIPT, un modelo ideal para aplicarse en el primer nivel de atención que se basa en la capacitación intensiva del personal, adquiriendo aptitudes y actitudes que nos permitieran hacer una buena labor”.

“En el PIPT se han formado muchos estudiantes realizando su Servicio Social, trabajos de tesis e investigaciones diversas en el área de control del tabaco, más los que han cursado la asignatura ‘Manejo Clínico del Paciente Fumador’; la Clínica se ha transformado en la Clínica de la UNAM y es un referente obligado cuando se habla de tabaquismo; ojalá que la Facultad de Medicina, que es la primera en la Máxima Casa de Estudios en ser libre de humo y emisiones, sea solamente el inicio, porque ahora vamos por la Universidad completa”, finalizó la doctora Ponciano Rodríguez.

Karen Hernández