El pasado 2 de agosto, se celebró la Ceremonia de Graduación de las Escuelas de Enfermería y Médico Naval del Centro de Estudios Superiores Navales en Ciencias de la Salud, para reconocer a 60 médicas y médicos y a 54 enfermas y enfermeros navales que concluyeron sus estudios académicos.

En el evento presidido por el almirante José Rafael Ojeda Durán, Secretario de Marina, la doctora Ana Carolina Sepúlveda Vildósola, Directora de la Facultad de Medicina de la UNAM, fue invitada como madrina de la 32º generación de la Escuela Médico Naval, integrada por 26 mujeres y 34 hombres, a la que dirigió un mensaje.

“Queridos graduados, hoy aplaudimos no sólo la culminación de sus estudios médicos, sino también el arduo camino que han recorrido para llegar hasta aquí. Su formación ha sido una combinación única y desafiante, que no sólo ha demandado excelencia académica, sino también un inquebrantable compromiso con la disciplina militar. Ustedes han demostrado una admirable capacidad para equilibrar estas dos facetas, y por eso merecen toda nuestra admiración y respeto”, expresó.

Recordó el camino recorrido de las y los graduados desde su ingreso en agosto de 2019 a la Escuela Médico Naval, resaltando su fuerza de voluntad y el compromiso invaluable para llegar hasta el final: “Festejamos y reconocemos el coraje, la disciplina y la pasión que han mostrado a lo largo de estos años. Han aprendido no sólo de la ciencia médica, sino también de la vida, el trabajo en equipo, el liderazgo, y el servicio a la comunidad. Ustedes son el vivo ejemplo de que, con dedicación y esfuerzo, se pueden alcanzar grandes metas”.

La doctora Sepúlveda Vildósola aseguró que ser médico requiere dedicación, pasión y una profunda vocación de servicio, y ser oficial naval añade una capa adicional de responsabilidad y sacrificio: “Han aprendido a navegar no sólo los mares, sino también las desafiantes turbulencias de la vida, siempre con un sentido de deber y honor. Su doble esfuerzo ha forjado en ustedes un carácter fuerte y resiliente, cualidades esenciales para quienes tienen la noble misión de salvar vidas y proteger, ante todo, nuestra patria”.

Asimismo, reflexionó que la profesión médica les exigirá empatía, paciencia y un compromiso constante con la actualización de sus conocimientos. “La vida militar les demandará coraje, disciplina y un espíritu inmutable. Ustedes están preparados para enfrentar estos retos con la misma determinación y valentía que han demostrado hasta ahora”.

“Graduados, el mundo necesita de su talento, su compasión y su liderazgo. Ustedes son el futuro, y en sus manos está la salud y la seguridad de nuestra nación. Recuerden siempre que cada diagnóstico, cada tratamiento y cada palabra de consuelo tienen un impacto duradero en la vida de las personas. Su labor no sólo se basa en la ciencia, sino también en la humanidad”.

Al desearles éxito en sus carreras y en sus vidas, les invitó a que siempre sean agradecidos con quienes los han formado y retribuyan a nuestro país sirviéndolo con honor. “Felicidades queridos egresados y egresadas: enfrenten el futuro con la misma determinación con la que superaron cada uno de los desafíos en su formación. Hoy, llevan con orgullo el título de médicas y médicos navales, un honor que sin duda han ganado con creces. Que esta nueva etapa esté llena de aprendizaje y crecimiento”.

La doctora Sepúlveda Vildósola los animó a seguir buscando el conocimiento y ofreció su ayuda como su madrina para ello. También agradeció la guía, los valores y conocimientos inculcados de sus profesores, así como a sus familiares y seres queridos por su apoyo incondicional.

Lili Wences