Tener en las manos la vida de alguien es una tarea colosal; reaccionar a situaciones de manera inmediata, y ser capaz de dar malas noticias a un paciente son parte de la vida médica diaria, sin dejar atrás el manejo de los sentimientos propios y ajenos.

En el taller “Inteligencia emocional y razonamiento en el entorno clínico”, organizado por la Secretaría de Enseñanza Clínica, Internado Médico y Servicio Social (SECISS), realizado en el marco de la 9ª Feria del Libro de Ciencias de la Salud, los doctores José Marcos Félix Castro y Rosalba Esther Gutiérrez Olvera resaltaron la importancia de que en el entorno médico se promueva la empatía y la humanidad.

Explicaron que a las habilidades blandascomo son el trabajo en equipo y las relaciones interpersonales, no se les da la misma importancia durante la formación del médico como a las habilidades duras, que incluyen, lecturas de libros, casos, artículos u otros materiales que puedan ampliar el conocimiento para el desarrollo de diagnóstico y tratamiento, dejando atrás este coeficiente emocional, que enseña cómo tratar a las y los pacientes.

Dentro de la inteligencia emocional, abundaron, tenemos componentes muy característicos e importantes, como la empatía, la habilidad social, la autoconciencia, la autorregulación y la motivación; estas últimas ayudan no sólo a conocerse como persona y saber qué tan duro se es con uno mismo, sino que también facilitan la toma de decisiones cruciales, rápidas y eficientes, ayudando a controlar el propio estrés en ciertos eventos.

Todo desafío es una oportunidad de desarrollar un crecimiento personal y profesional, de los errores surgen estas oportunidades, por lo tanto, es importante no reprimir emociones y aprender a transmitirlas de una manera saludable y eficiente, indicaron.

Utilizando el recurso educativo “Story Telling”, los facilitadores presentaron a la mamá de una paciente, quien nos contó cuál ha sido su vivir desde que le dieron el diagnóstico a su hija, pide a los médicos ser más humanos con sus pacientes y ante el dolor de éstos.

“Si no sienten lo que hacen, no desarrollan humanismo, profesionalismo o empatía”, manifestó el doctor Félix Castro, recalcando la importancia de expresar no sólo las emociones personales, sino también de los pacientes y familiares o compañeros.

Alfredo Ortiz