La Facultad de Medicina de la UNAM ha puesto en marcha un proceso de acercamiento y escucha activa con su comunidad universitaria para identificar los obstáculos que frenan el desarrollo educativo óptimo y fortalecer los vínculos entre docentes, estudiantes, personal administrativo y autoridades.
La doctora Ana Carolina Sepúlveda Vildósola, Directora de la Facultad, subrayó el compromiso de la institución con la mejora continua en la formación médica, destacando la importancia de abrir un diálogo franco y constructivo. “Nuestro compromiso es con la excelencia educativa, y por ello hemos decidido escuchar de manera cercana a quienes son el corazón de esta institución: nuestros profesores y estudiantes”, declaró la doctora Sepúlveda.
Como parte de este esfuerzo, se organizó el Foro de Socialización y Análisis del proceso de evaluación de la primera fase de la Licenciatura de Médico Cirujano, cuyo objetivo fue recopilar preocupaciones e inquietudes tanto del alumnado como del cuerpo docente. La finalidad, explicó la doctora Ana Carolina, es comprender de manera profunda y directa la realidad que enfrentan quienes participan en el proceso educativo y, sobre esa base, implementar soluciones para mejorar el entorno de aprendizaje, enseñanza y desarrollo personal.
El foro se realizó durante dos semanas en diferentes auditorios de la Facultad. La primera semana, del 19 al 23 de agosto, estuvo dedicada a los estudiantes, mientras que la segunda, del 26 al 30 de agosto, fue para los docentes. En estos espacios se plantearon temas que han afectado a la comunidad desde hace varios años, permitiendo que tanto estudiantes como profesores compartieran sus inquietudes y propuestas de mejora.
Entre los principales puntos abordados por los estudiantes, se destacó la necesidad de modernizar la enseñanza, adaptándola a sus estilos de aprendizaje y al uso de tecnología, así como integrar aspectos teórico-prácticos desde los primeros semestres. Los alumnos manifestaron su preocupación por la sobrecarga de exámenes, indicando que esto obstaculiza un aprendizaje significativo. Sugirieron implementar evaluaciones continuas con retroalimentación frecuente, reducir el número de exámenes y enfocarlos en competencias aplicables al ejercicio profesional.
Otra de las inquietudes del alumnado fue la necesidad de una evaluación docente más eficaz, que contemple un programa de retroalimentación a los profesores y ajustes en el contenido de las asignaturas. Además, resaltaron el impacto del estrés académico y la importancia de contar con más tutorías y apoyo psicológico, proponiendo estrategias para mejorar el bienestar emocional y el rendimiento académico. También sugirieron una mayor comunicación de doble vía con la Dirección.
Por su parte, los profesores hicieron énfasis en la necesidad de actualizar el plan de estudios para responder a las demandas actuales del campo médico, así como mejorar la infraestructura de la Facultad, ya que las aulas sobrecargadas dificultan la calidad de la enseñanza. Mencionaron, también, la poca comunicación entre los docentes y los coordinadores académicos. Además, la necesidad de encontrar soluciones para regularizar a los estudiantes que ingresan respecto a algunas deficiencias formativas detectadas a su llegada.
Los docentes también expresaron la urgencia de contar con una capacitación continua y estructurada en temas pedagógicos y tecnológicos, junto con una evaluación de su desempeño que se centre en la mejora de la enseñanza. Se destacó la importancia de cambiar la cultura de evaluación, orientándola hacia el aprendizaje y no sólo a la aprobación de exámenes.
La doctora Sepúlveda, haciendo eco de estas inquietudes, reiteró la relevancia de fomentar estos espacios de diálogo y subrayó que este proceso no sólo responde a las demandas de un entorno educativo cada vez más exigente, sino también a la responsabilidad institucional de garantizar una formación médica de excelencia, sin perder de vista la calidez humana que los tiempos actuales demandan: “Queremos que nuestra comunidad sepa que estamos trabajando para transformar positivamente la formación en la Facultad. Todas, todos y todes son escuchados y sólo a través del diálogo y la cooperación podremos avanzar hacia una enseñanza más eficaz, inclusiva y de calidad”, expresó.
Comentó que en breve se abrirán nuevos espacios de participación para seguir recogiendo las propuestas y sugerencias de la comunidad, con miras a construir una educación de mayor calidad en la Facultad de Medicina. En este foro se tuvo la participación de 37 estudiantes y 110 docentes, se espera que en los siguientes también haya una amplia participación.