Con una emotiva ceremonia, la Facultad de Medicina de la UNAM celebró el 8° aniversario de su Programa de Donación de Cuerpos. Un proyecto pionero por parte de la Universidad que ha transformado la enseñanza y la investigación médica desde su creación en 2016, donde se reconoce la invaluable generosidad de las personas donantes, cuyo apoyo permite que cada cuerpo sea tratado con dignidad y respeto, convirtiéndose en un legado duradero para las nuevas generaciones de profesionales de la salud.
La doctora Mónica Beatriz Aburto Arciniega, Coordinadora de Ciencias Básicas de la Licenciatura de Médico Cirujano, en representación de la doctora Ana Carolina Sepúlveda Vildósola, Directora de nuestra Facultad, destacó el impacto trascendental de este programa en la formación de futuros profesionales de la salud y en el avance de la investigación médica. “El Programa de Donación de Cuerpos ha sido un modelo a seguir en diversas universidades del país, incluyendo la Universidad Autónoma de Nuevo León, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla y la Universidad de Guadalajara. Hoy celebramos los logros alcanzados y el impacto duradero que este programa tiene en la educación médica y la investigación en México”.
En su oportunidad, el maestro Ricardo Octavio Morales Carmona, Secretario Académico de la División de Estudios de Posgrado (DEP), enfatizó el esfuerzo institucional detrás de la operación de este programa, el cual cumple rigurosamente con las normativas universitarias y garantiza un manejo ético y seguro de los cuerpos donados. “La Facultad de Medicina ha establecido convenios de colaboración con otras instituciones educativas, lo que ha elevado el acceso a este recurso para escuelas de Medicina que no cuentan con él, beneficiando al 21 por ciento de las instituciones en México“, explicó. Asimismo, mencionó la peculiaridad de este tipo de donación, en la que los beneficiarios no son siempre identificables, pero cuyo propósito común es fomentar una comunidad sana mediante un conocimiento más profundo y mejores prácticas.
Posteriormente, el doctor Alberto Manuel Ángeles Castellanos, Jefe del Departamento de Innovación en Material Biológico Humano, resaltó la importancia de disponer de material biológico real para la formación integral de los médicos, algo que impacta directamente en su empatía y compromiso social. “Estar ante el cuerpo de una persona que en vida fue un hermano, una pareja o un amigo despierta en el estudiante un sentido profundo de humanidad y responsabilidad moral. Un médico sin esta formación podría reducirse a un técnico en atención médica, y el verdadero propósito de la Medicina va mucho más allá de la técnica“, reflexionó. Por otro lado, consideró que es necesario establecer programas de donación en otras instituciones para afrontar la creciente demanda de material biológico en la enseñanza de la Medicina.
Por su parte, el licenciado Adán Moreno Escalante, asesor jurídico de dicho programa, abordó los desafíos legales y culturales que enfrenta. “A pesar de las dificultades para obtener permisos y adecuar la infraestructura, hemos logrado construir un entorno que respeta profundamente la dignidad de cada donante. Gracias a las reformas en 2018, el programa ya no depende de cuerpos no reclamados, sino que cuenta con donaciones voluntarias, lo que asegura un manejo ético en cada caso“. Añadió que los cuerpos donados se tratan con el máximo cuidado, desde su transporte en una carroza digna hasta su conservación en el anfiteatro de la Facultad.
La actividad concluyó con un sentido homenaje a los donadores y la entrega de un colibrí a las familias de los mismos, con el siguiente significado: “Se dice que por las noches dejan que las almas del Mictlán entren a sus cuerpos para poder visitar a sus familiares en la tierra”. Gracias a su generosidad y al compromiso de la Facultad de Medicina, el Programa de Donación de Cuerpos sigue siendo un pilar fundamental en la formación de médicos comprometidos y en la creación de conocimiento para el avance de la salud.
Fotografías: Brisceida López
Diego García