Doctor Rubén Argüero

Entre reflexiones sobre si el corazón es realmente el centro de las emociones, el doctor Rubén Argüero Sánchez, jefe del Departamento de Cirugía de la Facultad de Medicina de la UNAM, destacó la importancia del entusiasmo en todo lo que hacemos: “No se concibe un buen médico si no es un entusiasta, si no tiene una amante, que es la Medicina”, destacó.
La nariz es un elemento importante para hacer la selección de pareja, ya que mediante el olfato se reconoce el Complejo Mayor de Histocompatibilidad, por eso cuando alguien se enamora «ocurre el amor al primer olfato y el sujeto pasa de un estado de salud a padecer la psicopatología obsesiva compulsiva», manifestó.
Indicó que otros órganos que intervienen son los capilares, el corazón y el hígado, pero aseguró que son las mujeres quienes eligen a los hombres.
Sin embargo, “independientemente de que las personas se fijen en los ojos, el cuerpo o la inteligencia, lo que no se puede perder de vista es que para que persista una buena relación, los valores, el respeto, el deseo, el cariño y el interés son los elementos que la hacen perdurar”, afirmó.
Al hablar del corazón, el doctor Argüero Sánchez resaltó que, con escasos 800 gramos, es capaz de mover cinco litros de un líquido cinco veces más viscoso que el agua, y lo hace a través de 80 mil kilómetros de conductos de diferentes diámetros, en menos de un minuto y, además, lo realiza en contra de la gravedad en más de la mitad del recorrido.
En 10 años, este músculo se contrae 350 millones de veces, es “un órgano maravilloso que trabaja sin descanso y si se para o simplemente se llega a detener escasos cinco minutos deja daño irreversible en el cerebro y, después de 15 minutos, se tornan inútiles la mayoría de los órganos”.

Lili Wences