Las plantas sagradas del mundo indígena, incluidos los hongos y animales que contienen sustancias psicoactivas, tienen mucho que aportar al ámbito de la salud; sin embargo, el conocimiento al que podamos acceder y los beneficios que puedan aportar dependerán de la forma y la actitud en que nos acerquemos a ellas y a sus especialistas: los médicos tradicionales indígenas, consideró el doctor Jesús González, de la Universidad Complutense de Madrid, España, durante la presentación del libro El laberinto de la ayahuasca.

En esta obra, su autor, el doctor Manuel Almendro, reúne casi 40 años de investigación científica y vivencias en la selva amazónica peruana y la sierra mazateca mexicana, proponiendo una reconciliación de las ciencias exactas, las ciencias humanas y las prácticas y saberes tradicionales.

En el Viernes Cultural de la Facultad de Medicina, el doctor Jesús González resaltó el carácter transdisciplinario e intercultural de las investigaciones del doctor Almendro acerca de la salud mental y, en particular, del mundo de las plantas sagradas y sus aportes a las investigaciones de la conciencia. “En su análisis, el autor intenta rebasar las fronteras disciplinarias para dirigirse a la unidad de conocimiento en la construcción de saberes y prácticas en torno a la ayahuasca, planteando la necesidad de legitimar los saberes tradicionales del mundo indígena”, explicó.


Por su parte, el sacerdote José Luis Sánchez, quien vivió 25 años en la sierra mazateca, consideró que hay mucho por aprender de los indígenas en México, quienes tienen una visión integrada de la vida: “No son pueblos en distintas fases de desarrollo, sino que tienen otras formas diversas de vivir y de entender el mundo”.

El doctor Carlos Viesca Treviño, docente en la Facultad de Medicina, describió a El laberinto de la ayahuasca como una publicación “grande de tamaño y contenido”, que en 632 páginas, “con lenguaje claro y exquisito nos ofrece una amplia visión de sustancias que actúan sobre la mente-conciencia, así como la importancia de tener un respeto por las medicinas tradicionales que nos están dando conocimientos y, a la vez, ellas reciben los nuestros”.

Al hacer un recuento de las investigaciones clínicas de los psicotrópicos, la doctora Anja Presser-Velder, directora de Psicoterapia e Investigación del Instituto de Medicina Intercultural Nierika AC, advirtió que en las experiencias con éstos debe haber una preparación psicoterapéutica del paciente y de acompañamiento, “porque sin esos contextos son muy peligrosos, hay secuelas fuertes y negativas en la salud mental”.

Lili Wences