Hoy por hoy existen medidas que son clave para disminuir la transmisión del virus SARS-CoV-2, como lo es el lavado frecuente de manos o el uso de cubrebocas. Pero estas medidas pueden causar irritación y daño en la piel, por lo que hacer cambios en su cuidado puede ayudar a disminuir estos efectos.

Existen diferentes enfermedades dermatológicas que estaban presentes antes de la pandemia como la dermatitis atópica, el acné, la dermatitis seborreica o rosácea que se exacerbaron, ya sea por abandono de los tratamientos, por el estrés o cambios en los hábitos. Existen otras enfermedades dermatológicas ocasionadas por la COVID-19 y éstas se clasifican en las directas y las indirectas. En las primeras se encuentran el efluvio por COVID-19, que es la caída de pelo, y las lesiones cutáneas causadas directamente por el virus. En las segundas se encuentran la dermatitis por contacto en manos y el acné por el uso de cubrebocas, señaló la doctora Selene Gutiérrez Mendoza, adscrita a la Clínica de Oncodermatología de la Facultad de Medicina de la UNAM.

“Algunas recomendaciones para cuidar la piel son: lavar el rostro por la mañana y la noche con el jabón adecuado para cada tipo de piel, utilizar cremas emolientes y no usar la misma que se usa en el cuerpo para la cara, usar un filtro solar adecuado, evitar productos irritantes, no aplicar remedios caseros y no maquillarse cuando se usará el cubrebocas”.

Dra. Selene Gutiérrez Mendoza

Una de las alteraciones más comunes es la dermatitis por contacto, la cual se presenta por el lavado frecuente de las manos con jabones que no son adecuados para nuestro tipo de piel. “Esta enfermedad se manifiesta con grietas en las manos, resequedad y engrosamiento de la piel, que puede complicarse en un eczema en donde los pacientes presentan lesiones y pueden infectarse”, detalló la doctora Gutiérrez Mendoza en su plática transmitida por Facebook Live de la Facultad.

Por ello, abundó, la Academia Americana de Dermatología da una serie de recomendaciones para prevenirla, como: lavar las manos con jabón y agua durante 20 segundos, lavar y secarlas gentilmente e inmediatamente después usar emolientes que tengan como base aceite mineral o petrolato, elegir humectantes que no tengan fragancias ni colorantes y, si no se tiene la posibilidad de lavar las manos, usar desinfectantes con alcohol al 70 por ciento.

Además, el uso de cubrebocas ha traído afecciones como la dermatitis seborreica y la exacerbación del acné, por lo que para prevenirlas es importante la limpieza usando jabones adecuados para los diferentes tipos de piel.

Asimismo, cuando se elige un cubrebocas es recomendable buscar telas naturales como el algodón y evitar las telas sintéticas; si se utilizan mascarillas reutilizables éstas se tienen que lavar todos los días, evitar perfumes o fragancias en los productos para limpiarlas, y si se usan cubrebocas desechables hay que cambiarlos todos los días, detalló.

Para las personas que usan la mascarilla por más de cuatro horas sugirió tomar un descanso de su uso retirándola por 15 minutos sólo si es seguro hacerlo, es decir, si no hay nadie alrededor o si no se está en una zona de alto riesgo, después se puede utilizar agua micelar o toallitas especiales para limpiar la cara y esto reducirá los brotes de acné que se puedan presentar.

Janet Aguilar