Hoy en día el acceso a la información se realiza de manera fácil y rápida, sin embargo, eso no significa que toda sea verdadera. Es por ello que ante la situación en que vivimos actualmente sobre la COVID-19, se debe evitar llegar a la sobre información, ya sea con noticias falsas o reales, pues se pueden generar problemas en salud mental.
“La emoción a la que nos enfrentamos por esta situación principalmente es de miedo, lo que va a generar cambios fisiológicos en el cerebro y que, a su vez, va a incidir en un cambio actitudinal, pues se pueden presentar síntomas como: sudoración de manos, frecuencia respiratoria aumentada, además de palpitaciones, esto se presentará de forma aguda, sin embargo, si este estado continúa comenzará a afectar la calidad de vida, por ejemplo, el sueño”, explicó el doctor Benjamín Guerrero López, responsable de la Clínica de Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNAM.
Si bien, de forma natural el cerebro responde ante situaciones de amenaza, pues tiene como objetivo buscar una solución y protegerse, no toda la gente responde igual, por lo que en algunas predomina el pánico. “Algunas personas son más aprensivas y más temerosas, pues los circuitos de las estructuras cerebrales que se activan en situaciones de peligro lo hacen con mayor facilidad, esto tiene relación con la situación biológica que cada uno tiene, pues se modifica dependiendo las situaciones que se han vivido”, explicó el especialista.
De tal manera que lo anterior explica algunos escenarios que hemos vivido en las últimas semanas, como las compras de pánico, las cuales son consecuencias personales, familiares, económicas y sociales, pues la gente se contagia de miedo y toma medidas irracionales, debido a que no se está pensando en una solución del problema, simplemente replica lo que los demás hacen y después de un tiempo es cuando reflexiona si se hizo lo correcto o no.
“Definitivamente hay gente que tiene reacciones más intensas, por lo que es importante señalar que quienes tienen algún problema emocional, por ejemplo ansiedad, son más propensos a tener recaídas, o bien, a desarrollar algún otro malestar. Es por ello que algunas recomendaciones son: hacer un gran esfuerzo por controlar sus emociones, pues de lo contrario será peor que el problema mismo; además, pueden hacer uso de plataformas digitales para buscar técnicas de relajación, y en cuanto a la información sobre la situación asegurarse que sea de páginas confiables y oficiales”, mencionó el doctor Guerrero López.
Cabe destacar que aquellas personas que previo a la situación actual presentaban ansiedad, o bien, una enfermedad que los ponen en mayor riesgo de tener Covid-19, deben tomar en cuenta la posibilidad de buscar ayuda psicológica o psiquiátrica para llevar con más tranquilidad la crisis y en algunos casos que se les prescriba algún medicamento para evitar una angustia excesiva.
Por su parte, la UNAM a través del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental, ha implementado un programa de atención para la comunidad universitaria, en el cual se dará terapia mediante videollamadas. “Únicamente tendrán que entrar a la liga http://sistemasib.facmed.unam.mx/saludMental/ y se les pedirán algunos datos, se les agendará la cita y el día de ésta se hará una comunicación por un programa de telemedicina”, informó el coordinador de la Clínica de Salud Mental.
Diana Karen Puebla