Por la loable y sustancial labor que desempeñan para formar excelentes profesionales de la salud, la Facultad de Medicina de la UNAM felicita a sus académicos y académicas que todos los días ponen su máximo empeño para enseñar a sus estudiantes no sólo conocimientos, sino cómo conducirse con ética y humanismo para servir a los demás.
Como una gran cadena, la enseñanza de las Ciencias de la Salud une a todos los eslabones que dedican su tiempo y esfuerzo al cuidado de las personas, a la atención de su salud, desde el estudiante, el experto, el investigador, hasta el subespecialista; esta cadena de enseñanza nos ha impulsado desde los inicios de este arte a ser mejores, nos ha inspirado a ser como los grandes y nos llena de invaluables enseñanzas.
Agradecemos hoy y siempre a todos aquellos que, con sus consejos, la observación de su ejercicio profesional y por sus clases, han formado a profesionales en el área de la salud de gran calidad y comprometidos a proteger a los más vulnerables.