Un secuenciador de ADN permite conocer el orden de las letras que están en el ácido desoxirribonucleico como adenina, guanina o citocina, y ese orden ayuda a identificar eventualmente si existe algún cambio con respecto a alguna muestra de referencia. Esto aplicado al ámbito forense posibilita saber cuáles son las posiciones de ciertas regiones en el genoma humano.

En México sólo existen tres equipos de este tipo, y la Licenciatura en Ciencia Forense (LCF) de la Facultad de Medicina de la UNAM logró hacerse de uno gracias a una convocatoria del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, en donde se participó con el “Proyecto de Fortalecimiento de la Infraestructura para el Desarrollo de la Genómica Forense”.

“Adquirimos este equipo con un objetivo dividido en dos vertientes, el primero es desarrollar proyectos de investigación donde se pueda utilizar, obviamente dentro de estos proyectos está la formación de recursos humanos tanto de estudiantes de posgrado como personal académico que quiera utilizarlo; y tener un equipo al alcance para que en un futuro se puedan establecer colaboraciones con fiscalías, para hacer cursos especializados, tanto en su uso como en el análisis de los datos”, explicó el doctor Mariano Guardado Estrada, responsable del Laboratorio de Genética en Investigación de la LCF.

Asimismo, se espera que con esta adquisición se pueda capacitar y formar recursos humanos de alto nivel en el uso y manejo de los datos de secuenciadores de ADN, así como ser un punto de referencia para el desarrollo de la genómica forense en México y para desarrollar proyectos de esta área a largo plazo.

Cabe recordar que anteriormente estos procedimientos se realizaban a través de secuenciadores de electroforesis capilar, por lo cual se está dando un paso importante hacia la modernización y ahora se podrá analizar de forma robusta una mayor cantidad de marcadores genéticos, bajo el entendimiento de que no siempre se tienen las condiciones óptimas de las muestras en las ciencias forenses.

Por otro lado, a mediano plazo se pretende realizar bases de datos poblacionales, principalmente de genomas mitocondriales, ya que el ADN mitocondrial es un genoma extranuclear que se está utilizando mucho en el ámbito forense. A la vez, esto generará un aporte a la comunidad científica nacional e internacional, pero principalmente les permitirá hacer un análisis mucho más extenso y favorecer el número de identificación de personas.

“Estamos muy orgullosos de adquirir este equipo. Esto nos sitúa a la altura de muchos centros de investigación importantes relacionados con el área de la genética forense a nivel nacional y mundial. Esperamos contribuir sustancialmente para el desarrollo de esta área. Pese a las condiciones que ha habido en los últimos años, estamos muy orgullosos de decir que no hemos parado y el arduo trabajo se ha materializado en la adquisición de este equipo”, concluyó el doctor Guardado Estrada.

Por su parte, la doctora Zoraida García Castillo, Coordinadora de la LCF, resaltó que el contar hoy con este secuenciador de última generación permitirá que el Laboratorio de Investigación en Genética Forense pueda generar bases de datos genéticos útiles para la investigación forense, ofrecer servicios, capacitar personas y situarse a la venguardia en la investigación genómica en México.

Eric Ramírez