Izebel Zoloyozith Rojas Martínez es estudiante del primer año de la carrera de Médico Cirujano, es proveniente de una familia de médicos de la comunidad indígena de los zapotecas del Istmo de Tehuantepec.

Recordó haberse acercado a la Medicina por curiosidad, escuchando a su papá hablar de temas médicos: “Cuando convives con doctores, siempre quieres entender de lo que están hablando y así fue como decidí estudiar Medicina, por curiosidad.”

Mencionó que desde que tiene uso de razón ha tenido cierta pasión por la pintura, a tal grado de rayar las paredes de su casa ganándose regaños, pero al entrar a la escuela comenzó a dibujar en el papel de sus cuadernos, hasta que compró libretas especiales para sus creaciones, porque con tanto dibujo dejó de tener espacio para los apuntes y tareas.

Sigo dibujando en la pared de mi cuarto, pero también uso lienzos. Mi técnica favorita son los óleos y los acrílicos”, comentó Izebel al asegurar que replicar cuadros de personajes como Vincent van Gogh y Frida Kahlo es lo que más le gusta pintar, pero el paisajismo también lo disfruta bastante.

Comentó que tras ingresar a la carrera, se sintió especialmente atraída por el dibujo anatómico, el cual le gustaría desarrollar y perfeccionar en el futuro para poder crear obras únicas que representen su estado de ánimo y los espacios en que se desarrolla.

Para ella, dividir el tiempo entre la Medicina y la pintura le ha resultado muy natural: “Terminar la carrera es mi prioridad, pero siempre encuentro un tiempo libre para pintar, necesito ese tiempo para realmente disfrutar lo que estoy haciendo, tanto la Medicina como la pintura.”

El sueño de Izebel es abrir un hospital en su comunidad, pero sin dejar de lado su pasión por la pintura: “Me gustaría mucho fundar un hospital en mi comunidad dedicado a Ginecología y Obstetricia, que es en lo que me quiero especializar, pero también quiero un espacio en donde exponer mis obras, por eso quisiera poner algunos cuadros en los pasillos de ese hospital para hacerlo totalmente a mi gusto y con mi esencia.”

Izebel es un ejemplo de lo bien que pueden converger disciplinas del conocimiento cuando se hacen con pasión, dándole el tiempo adecuado a cada una.

 Luz Aguirre