Tranquilidad, libertad, felicidad, gratitud y plenitud, fueron algunas de las emociones que experimentaron las y los asistentes a la mega clase de yoga el pasado 23 de enero, impartida por la profesora Solymar Adame Rivas, quien aseguró que la práctica constante tiene grandes beneficios tanto físicos como emocionales: “Cada práctica te permite fortalecer todo el cuerpo, debido a que se trabaja resistencia, flexibilidad, fuerza y equilibrio. Además, se ha observado que ayuda a disminuir la sintomatología de estrés, ansiedad y depresión”.
En ese sentido, esta actividad “nos permite estar en contacto con nosotros mismos, sin embargo, hacerlo en compañía de otras personas nos alienta a superar nuestros límites, por lo tanto, se crea una armonía energética”.
Así, el jardín frente a la explanada roja fue el escenario ideal para tener unos minutos de paz y, de esa manera, transitar por los diferentes momentos de la práctica: quietud, meditación y movimiento, con el objetivo de entrar en contacto con la mente y el cuerpo, y despertar los sentidos al tomar conciencia de la tierra que pisamos, el aire que respiramos y el sol que nos ilumina.
Para María Guadalupe Vera Gregorio, estudiante de la Licenciatura de Médico Cirujano, la clase fue un descanso y le pareció “muy interesante y positiva, en nuestra carrera hay mucha presión y el yoga es algo que realmente favorece la calma. Es la primera vez que lo intento y me encantó”.
En ese sentido, la alumna Nataly Raquel compartió que “todas las personas hicieron que el ambiente fuera muy acogedor. Es increíble que podamos tener acceso a este tipo de dinámicas”.
La práctica concluyó al compás de un “Om” y el grupo se despidió de aquel entorno de relajación, reconociendo la satisfacción y los aprendizajes que cada quien obtuvo de la experiencia.
El taller de yoga está dirigido a toda la comunidad, se imparte los martes y jueves, de 15:00 a 16:00 horas. Para más información, acude al Programa de Actividades Deportivas y Recreativas, ubicado en el basamento del edificio G.
Isabel García