Con el objetivo de que las y los futuros científicos en nutrición humana tengan un laboratorio que les permita aplicar los conocimientos adquiridos en las diferentes asignaturas en la resolución de casos clínicos, trabajar de manera colaborativa además de visualizar la prescripción dietético nutricional desde diferentes miradas: paciente, cuidador y profesional, así como un espacio para dar atención clínico nutricional y realizar investigación, la Facultad de Medicina de la UNAM inauguró el laboratorio Cocina Metabólica y área de atención clínico nutricional de la Licenciatura en Ciencia de la Nutrición Humana (LCNH).
“El hecho de que nos hayan otorgado un laboratorio de esta calidad y estos tres espacios de atención a la comunidad, nos va a permitir consolidarnos y seguir creciendo”, adelantó la doctora Elvira Sandoval Bosch, Coordinadora de la LCNH, al agradecer al doctor Germán Fajardo Dolci, Director de la Facultad de Medicina, a la doctora Irene Durante Montiel, Secretaría General, y a todas las autoridades que participaron para lograr ese espacio en beneficio de los estudiantes.
En la inauguración, estudiantes de la primera y segunda generación de la LCNH hicieron una demostración del trabajo que realizan en el laboratorio Cocina Metabólica; alumnas y alumnos de cuarto semestre, en la asignatura “Nutrición clínica y dietoterapia I”, prepararon un dip de zanahoria con rollitos de calabaza rellenos de carne molida con puré de papa y aguacate, helado de mango natural y agua de sandía, una propuesta de comida como parte del tratamiento dietoterapéutico para una paciente que presenta esofagitis, estomatitis, desnutrición y anemia.
Asimismo, los estudiantes de segundo semestre, en la asignatura “Química de alimentos”, deshidrataron frutas de temporada, prepararon cajeta baja en azúcar y pan integral, con el objetivo de probar materias primas diferentes y evidenciar las ventajas de sus preparaciones frente a los productos comerciales.
“Este espacio es de mucho aprendizaje para las y los alumnos porque pueden intentar diferentes técnicas culinarias y hacer variaciones entre los alimentos; eso ayudará a conocer cuáles son las mejores opciones alimenticias para los pacientes y así brindarles alternativas mucho más nutritivas”, explicó el doctor Luis Fernando Espinosa, Profesor de la asignatura “Química de alimentos” de la LCNH.
A partir de junio, estudiantes, bajo la supervisión de sus profesores, darán asesoría nutricional a la comunidad universitaria en los tres consultorios que se encuentran junto al laboratorio Cocina Metabólica, ubicado en el sótano del edificio “A”, a un costado del MicroPET y el Bioterio. Las citas se podrán agendar a través de la página de la LCNH (https://nutricion.facmed.unam.mx/), y se dará servicio, en un principio, de lunes a viernes, de 8:00 a 14:00 horas.
Así, los estudiantes que estén cursando las asignaturas “Bases de la nutrición y cálculo dietético”, “Alimentación y nutrición en el curso de la vida”, “Alimentación y nutrición en instituciones”, “Nutrición clínica y dietoterapia I a la V”, “Alimentación sostenible”, “Alimentación y nutrición con personas con discapacidad”, “Trastornos alimentarios y de la ingestión de alimentos”, “Química de alimentos” y “Microbiología”, podrán realizar sus prácticas en el laboratorio Cocina Metabólica.
Fotografías: Carlos Díaz
El beneficio para las y los estudiantes de la LCNH
Omar Rodríguez García mencionó que “es muy enriquecedor contar con el laboratorio Cocina Metabólica porque nos va a permitir tener un acercamiento muy grande con el proceso de cocina, podremos experimentar y conocer cómo se pueden adaptar los alimentos a la dieta de los pacientes para dar un buen tratamiento nutricional”.
Para Andrea López García, el laboratorio Cocina Metabólica les dará las herramientas para hacer un correcto tratamiento nutricional, pues aplicarán las técnicas que aprenden en su carrera respecto a cómo se modifican los alimentos para ayudar a la recuperación de los pacientes.
Asimismo, Alejandra Luna Burelo puntualizó que dicho espacio es una gran oportunidad para tener en cuenta las necesidades de cada paciente de acuerdo con las enfermedades que tengan, con el objetivo de ser más empáticos con ellos.
Karen Hernández