“La Ciencia Forense se encarga de investigar delitos y/o examinar pruebas que podrían presentarse en un tribunal de justicia, y para lograrlo comprende una amplia gama de disciplinas; de ahí que no debamos limitar nuestra búsqueda de conocimiento a una sola herramienta”, indicó la maestra Mercedes Cabello Ruíz, Coordinadora de la Biblioteca «Dr. Valentín Gómez Farías» de la Facultad de Medicina de la UNAM.

Con el objetivo de listar distintas fuentes de información disponibles (por suscripción o acceso abierto) para el área de Ciencia Forense, el pasado 30 de mayo, la última sesión del “Quinto Ciclo de Cursos Virtuales: Aprende el Acceso y Uso de la Información con el Sistema Bibliotecario” se dedicó a este tema.

En la actividad transmitida por Facebook Live y YouTube, se presentó un panorama general acerca de las clasificaciones de las distintas fuentes de información, y una guía de pasos a seguir para mejores resultados en la búsqueda. “Primero hay que definir el problema de investigación, luego revisar los recursos secundarios relevantes, examinar trabajos existentes como referencia y, por último, formular las palabras clave”, señaló la maestra Cabello Ruíz.

Lo anterior lo ilustró mediante un recorrido detallado a través de la gama de opciones disponibles que abarcó tesauros, diccionarios y enciclopedias especializadas, bibliotecas físicas y digitales, catálogos, bases de datos, sitios de sociedades de ciencias forenses y publicaciones académicas, incluyendo recursos en Internet. De cada una de estas fuentes se dieron ejemplos nacionales e internacionales, dentro de los cuales hubo varias menciones a los recursos propiamente universitarios y a aquellos a los que la comunidad estudiantil tiene disponible una consulta completa y gratuita por medio del servicio de Acceso Remoto UNAM.

“Una vez realizada la búsqueda de manera exitosa, la siguiente interrogante es ¿cómo evaluar la información para decidir si es útil para nuestro propósito?” comentó. Para ello, dio un par de consejos que podrían ayudar al estudiante a discernir la fiabilidad de los datos encontrados: revisar la actualidad de la publicación, la documentación citada, la calidad de la redacción, así como comprobar la existencia del número estándar internacional de libro (ISBN, por su sigla en inglés) y la reputación de la autoría y/o del editor comercial.

Previo a concluir, la ponente dedicó un espacio para reflexionar sobre los malos hábitos que frecuentemente se tienen en el uso de la información: “Copiar y pegar sin citar encabeza la lista, seguido de plagiar, consultar sitios de dudosa veracidad, creer que todo lo publicado en Internet es verídico y, en los últimos años, el no asistir a las bibliotecas y no usar colecciones especializadas”.

La transmisión cerró con la invitación del licenciado Javier Díaz Castorena, responsable de la Biblioteca Médica Digital, a visitar éste y todos los cursos del Quinto ciclo en https://bibliotecas.facmed.unam.mx/cursos/.

Athziry Portillo