Con la finalidad de visibilizar el trabajo y las valiosas aportaciones de las mujeres médicas y científicas a lo largo de la historia, en el marco de la celebración del Día de la Médica y el Médico, la doctora Ana Carolina Sepúlveda Vildósola, Profesora Titular “C” de la Facultad de Medicina de la UNAM, impartió la conferencia “La mujer en la Medicina”.

Al destacar la participación de las mujeres en la ciencia desde la antigüedad, puntualizó que “la mujer primitiva diseñó y fabricó utensilios, acumuló conocimientos sobre plantas comestibles y medicinales, y aprendió a mezclar sustancias para aplicarlas como tratamiento efectivo de diversas enfermedades”.

Con el paso del tiempo, la ideología de orden androcéntrico invadió el desarrollo científico y académico, por lo que las mujeres comenzaron la lucha en contra de prejuicios y estereotipos de feminidad para lograr el acceso a la educación, la investigación y las actividades laborales. “No fue sino hasta 1980 que cobró importancia la discusión de perspectiva de género en la ciencia”, recordó.

En la conferencia transmitida por Facebook Live y YouTube, la doctora Sepúlveda Vildósola destacó que afortunadamente estos obstáculos no han sido suficientes para detener el progreso del género femenino en la ciencia y en la Medicina, pues de 1901 a 2022, 61 mujeres han sido galardonadas con el Premio Nobel y 13 de ellas en las ramas de Fisiología y Medicina; sin embargo, las oportunidades para hombres y mujeres siguen siendo desiguales en cuestión de salarios, puestos de trabajo, acreditaciones, financiamientos y posiciones de mando.

“Al haber pocas mujeres dentro de estos ámbitos, los temas de interés en la ciencia se guían por perspectivas masculinas, limitando el progreso de líneas de investigación y favoreciendo situaciones de discriminación, micro agresión, exclusión en reuniones sociales y de negocios, comentarios inapropiados y acoso sexual”, señaló al indicar que sólo el 40 por ciento de los hombres científicos perciben que existen barreras para el desarrollo de las mujeres e incluso han existido consecuencias laborales para quienes defienden la igualdad de género en la práctica científica.

En la actualidad se han implementado estrategias para aumentar la presencia femenina en la academia, la investigación, los comités científicos y el liderazgo en la ciencia, como reconocer el valor de la mujer en la sociedad a través de espacios dedicados a reflejar el desempeño de científicas e investigadoras, facilitar el cumplimiento de roles de manera equitativa, concientizar a la población sobre este tema, no estigmatizar los gustos, preferencias y habilidades de niñas y niños, promover a figuras femeninas como representantes sociales y participar activamente como modelo y apoyo para otras mujeres.

“No existe ninguna duda de que médicas y médicos somos igual de capaces para ejercer nuestra profesión y en la ciencia; como en el amor, los hombres y las mujeres nos complementamos”, concluyó la doctora Sepúlveda Vildósola.

Por L. Ixchel Díaz