En el fascinante mundo de los microorganismos, reafirmando su compromiso con la actualización y promoción de la investigación científica, el Departamento de Microbiología y Parasitología de la Facultad de Medicina de la UNAM celebró con éxito el II Simposio de Parasitología.

El evento se realizó los días 14 y 16 de noviembre, de la mano de expertas, académicas y entusiastas en la materia. Tal y como mencionó la doctora Norma Rivera Fernández, Coordinadora de Investigación del Departamento, al dar la bienvenida, subrayando la importancia de explorar, discutir y comprender el intrigante mundo de los parásitos.

La doctora Sylvia Paz Díaz Camacho, Rectora de la Universidad Autónoma de Occidente y especialista en Ciencias Biomédicas, abordó la «Evolución epidemiológica de la Gnatostomiasis«. Una zoonosis parasitaria transmitida por carne cruda de peces de agua dulce, utilizada en platillos como ceviche y prevalente especialmente en Sinaloa y Nayarit. Gnathostoma binucleatum es la especie responsable de infecciones humanas, desde lesiones inflamatorias cutáneas hasta complicaciones oculares, viscerales y neurológicas.

Se resaltó el papel de mamíferos como hospederos definitivos y diversas aves, reptiles y anfibios como hospederos paraténicos, así como la dificultad de recuperar las larvas en su forma infectante (L3A) para un diagnóstico definitivo. “Y, aunque el tratamiento está disponible, su complejidad y necesidad de seguimiento riguroso también representan desafíos”, detalló.

La doctora Díaz Camacho destacó la falta de información en muchos países debido a la ausencia de reporte obligatorio y abogó por la necesidad de centrarse en la identificación de antígenos inmunodominantes, el desarrollo de antiparasitarios eficientes y campañas educativas para cambiar hábitos alimenticios y concientizar a los viajeros sobre los riesgos asociados.

A continuación, la doctora Jazmín Alcalá Canto, Profesora Titular «C» del Departamento de Parasitología de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UNAM, habló de la importancia de abordar «Una sola salud. Parasitosis compartidas entre perros y gatos». Ya que uno de cada cuatro antiparasitarios se destina a estos animales, por los daños directos e indirectos que los parásitos pueden causar.

Para combatir eficazmente estas parasitosis, enfatizó la necesidad de conocer su ubicación geográfica precisa. Compartió información de la «Base de datos sobre registros de parásitos de perros en México«, revelando que la mayoría se encuentra en los alrededores de la Ciudad de México; siendo los más frecuentes la pulga Ctenocephalides, Ancylostoma (larva migrans cutánea), Giardia, Toxocara (larva migrans visceral), Cryptosporidium y Taenia.

Como medida preventiva, destacó la importancia de intervenciones veterinarias oportunas, evaluando siempre el entorno y alimentación de la mascota. Entre las recomendaciones se hizo hincapié en la realización de un examen fecal tres a cuatro veces al año con tratamiento basado en los resultados, o bien, la administración de tratamiento preventivo rutinario dos a cuatro veces al año, así como la desparasitación de las hembras en gestación, los cachorros y previo a la vacunación.

Ilustración: KINA BV

En el segundo día del Simposio, la doctora Ingeborg Becker Fauser, Jefa del Laboratorio de Inmunoparasitología de la Unidad de Medicina Experimental y responsable del Centro de Medicina Tropical de la División de Investigación de la Facultad de Medicina de la UNAM, presentó «Leishmaniasis en México: un problema creciente». Una enfermedad tropical, originalmente conocida como la «úlcera del chiclero», resultado de la compleja interacción entre el parásito Leishmania, la picadura del vector.(mosquita hembra del género Lutzomya), el reservorio y el hospedero.

Explicó el papel relevante de las proteínas de las glándulas salivales del vector en la inflamación temprana y rápida dispersión del parásito; pudiendo resultar en tres síndromes clínicos distintos: Leishmaniasis cutánea, mucocutánea y visceral, desencadenadas por las especies L. mexicana, L. braziliensis y L. donovani chagasi, respectivamente.

Razón por la que, para el diagnóstico preciso, se utilizan diversas pruebas inmunológicas y moleculares, con una posterior confirmación mediante secuenciación para identificación de la especie. En cuanto al tratamiento, se mencionó el uso del antimonial pentavalente, ya sea de manera intralesional o sistémica, con la consideración de evaluar la aplicación de un antibacteriano. Enfatizando la monitorización regular de la bioquímica sérica, el hemograma y el electrocardiograma del paciente.

Finalmente, la doctora María de la Luz Galván Ramírez, Investigadora del Departamento de Microbiología y Patología del Centro Universitario de Ciencias de la Salud en la Universidad de Guadalajara, presentó la ponencia «Toxoplasmosis en grupos de riesgo en México». Enfermedad prevalente en áreas cálidas y húmedas; causada por el protozoo Toxoplasma gondii en alguna de sus tres formas infectantes: taquizoítos, bradizoítos y ooquistes, encontrándose esta última en las heces de los gatos.

El ciclo de reproducción del parásito incluye una vía sexual en felinos y una asexual en huéspedes intermediarios, como los seres humanos. Ocurriendo la transmisión de diversas formas, como vía oral, transplacentaria, transfusión sanguínea y trasplante de órganos.

Dentro de los grupos de alto riesgo, identificó al personal de laboratorio, carniceros, trabajadores de rastro, veterinarios y personas inmunosuprimidas (como embarazadas y pacientes con VIH/SIDA), de los cuales, si bien el 80 por ciento son asintomáticos, el resto puede presentar síntomas como dolor de cabeza, fiebre y linfadenopatía; sumándose otras manifestaciones dependiendo del grupo afectado.

Una de las características destacadas del simposio fue su accesibilidad global a través de la transmisión por Facebook Live, dejando el testimonio de una visión más profunda de la importancia de la parasitología en la investigación médica y el impacto crucial que estos microorganismos pueden tener en la salud humana.

Por Athziry Portillo