La Licenciatura en Ciencia Forense tiene como propósito formar profesionales capaces de coordinar y realizar la investigación científica de un hecho presuntamente delictivo a través del estudio del material hallado en el lugar de los hechos, para contribuir a la procuración y administración de la justicia y prevenir el delito.

En la formación de sus alumnos, esta Licenciatura cuenta con dos áreas especiales para el aprendizaje de los alumnos: el Aula Digital y la Escena del Crimen, mismas que se han modernizado con el paso del tiempo desde su creación en 2013.

La primera es un espacio donde los estudiantes aprenden varias técnicas de procesamiento e integran sus informes de investigación que adquieren en la Escena del Crimen y en los laboratorios. Estos datos se comparten a través de la nube y se cuenta con vínculos institucionales que permiten el acceso a software especializados para un mejor desempeño del profesor y del alumno.

“Aquí los estudiantes hacen simulaciones 3D, estadísticas, análisis de fotografía y video para entrenar sus habilidades periciales, por ejemplo, estudios de identificación de personas o bien para recrear hechos de tránsito. También se preparan en el ámbito de los delitos cibernéticos”, informó el doctor Vicente Torres Zúñiga, docente de la Licenciatura.

Desde el primer día que los alumnos ingresan a la carrera se les prepara para utilizar las nuevas tecnologías y cómo convertirlas en sus aliadas. En esta Aula se están realizando varios proyectos paralelos: un trabajo que combina acústica y balística para localizar tiradores a través de registros sonoros, también se elaboran prototipos que pueden ser útiles para analizar sustancias y un sensor que registra la fuerza de golpes.

La Licenciatura en Ciencia Forense se nutre de varias materias como Química, Física, Derecho, Matemáticas y Bioética, por mencionar algunas. En este sentido, el Aula Digital también se utiliza para simular casos, dependiendo de las necesidades de las asignaturas.

“Tratamos que los estudiantes no se vean limitados cuando egresen; pensando en esto, les enseñamos lo más posible de tecnología, pero también cómo sustituirla, porque lo más importante es el pensamiento que les queremos inculcar”, enfatizó el académico.

Un espacio donde inicia el objeto de estudio forense

La Escena del Crimen es un lugar que se utiliza constantemente porque el objeto de estudio forense comienza ahí. Hay varios espacios dentro de la Universidad donde se puede montar
una escena, pero éste es especial.

Se busca que sea un escenario “plástico”, ya que se desea que el alumno aprenda a intervenir en diferentes situaciones, por lo que se cambian los temas y los elementos de interés forense. De igual modo, se cuenta con varios convenios para que los alumnos practiquen sus habilidades -con peritos profesionales- fuera de Ciudad Universitaria.

“No se trata de reproducir la totalidad de la realidad, porque puede ser muy compleja, lo que se busca es una temática didáctica que guíe a los estudiantes”, indicó el especialista.

Con estas simulaciones se pretende que el alumno tenga la mayoría de las herramientas para que al momento de encontrarse con una escena del crimen real, cuente con todos los elementos para hacer un trabajo benéfico para la sociedad.

Samantha Cedeño y Lili Wences

Samantha Cedeño y Lili Wences