La tarde del 10 de diciembre, la explanada de la Facultad de Medicina se llenó de música y espíritu navideño en la Pastorela “Jesús de Veracruz, historia de navidad en México”, adaptada y organizada por la Compañía Universitaria de Folklor Mexicano.

            La obra narra el nacimiento del niño Jesús a través de las danzas y bailes populares del estado de Veracruz, involucrando al espectador en todo momento. En ella, se pueden ver las perspectivas de la Virgen María y San José, así como el celebrar de los pastores y el enojo de los demonios.

            Para comenzar, sonó la pista Navidad Jarocha, a manera de introducción para que el público se familiarizara con el resto de la obra. Posteriormente, al ritmo de La Asunción, el arcángel Gabriel avisaba a la  Virgen María que era la elegida para llevar en su vientre al niño Dios.

            Las repercusiones de esto fueron de alegría por parte del pueblo, pero también existieron los demonios quienes, disfrazados con ropa negra y máscaras aterradoras, bailaron La danza de diablos, mostrando su descontento con la noticia. De pronto, los Ángeles comenzaron a aparecer para combatir a las fuerzas malignas.

            Esto dio paso a La Rama, representando el pedir de la posada, por parte de María y José. Una vez dentro de un hogar, los ángeles y las vírgenes, bailaron la Danza de los Xules, felices por ser los primeros en conocer al niño Jesús, entregando el don de la alegría y difundiendo paz por todo el pueblo.

            Posteriormente, los Reyes Magos ofrecieron obsequios y cada uno bailó: Melchor, interpretando la Danza Española, Baltazar con la Danza Afro, y Gaspar con la Danza Mexicana. Con ellos se abrió la pista, para que todo el pueblo bailara en honor del rey prometido.

            Los espectadores nunca quitaron su vista de la obra, pues fue un espectáculo diferente a las posadas tradicionales. Y justo cuando todos creían que la fiesta había acabado, ángeles, campesinos y vírgenes sacaron a bailar al público, para después juntos romper la piñata que trajo dulces para todos. Fue una fiesta sin igual, para cerrar el año y dar pie, a las actividades decembrinas.

Eric Ramírez