A través del arte y la literatura se han representado los distintos hechos destacados en la historia de la humanidad. Las enfermedades no podían quedar fuera, pues su manifestación epidémica ha cambiado las relaciones sociales y culturales y, por supuesto, los avances médicos y científicos.

Al respecto, la doctora Mari Carmen Sánchez, titular del Área de Intercambio de la Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM, consideró que, durante la actual pandemia, hemos estado inmersos en una situación histórica en la que la enfermedad ha demostrado las vulnerabilidades de nuestra sociedad, la desigualdad y lo difícil que es salir de estas crisis.

“Las epidemias son fenómenos complejos y multifacéticos. Aunque acotados a un periodo de tiempo, transforman drásticamente el devenir histórico y alteran todos los aspectos de la vida, empezando por el de la salud individual y colectiva; inmediatamente siguen los aspectos sociales, demográficos, económicos, políticos, culturales y, desde luego, emocionales”, destacó la doctora Sánchez en su conferencia virtual “Literatura y epidemias”, transmitida a través de Facebook Live de la Facultad de Medicina y presentada por la maestra Anel Pérez Martínez, directora de Literatura y Fomento a la Lectura de la UNAM.

Recordó que cada crisis de salud es única y particular, tanto por el virus que la produce como por las características y condiciones propias del contexto en el que aparece y se propaga. Cada contexto histórico va a definir y explicar las enfermedades y las epidemias a partir de los valores, los criterios y los conocimientos científicos que le son propios.

La especialista hizo un repaso de las epidemias de peste, cólera y tuberculosis, a fin de ejemplificar sus procesos y de sugerir la lectura de las obras literarias más emblemáticas que se han escrito sobre ellas.

“Estas obras van a presentar la condición humana en situaciones y respuestas que aparecen recurrentemente durante las epidemias. Desde luego, primero van a mostrar la vulnerabilidad de la sociedad en su conjunto, pero también en primer plano el temor, el miedo al contagio, al cuerpo enfermo y a la muerte. Igualmente van a expresar el miedo al otro y eso generará la estigmatización de grupos vulnerables, con base en su etnia, su religión y su clase social”, explicó la especialista.

La peste azotó Europa en tres ocasiones. Fue durante el siglo XIV que generó una profunda crisis demográfica debido a los millones de muertes que ocasionó. Sobre esta enfermedad tenemos El diario del año de la peste de 1665 deDaniel Defoe, Los novios de Alessandro Manzoni, La peste de Albert Camus, y Peste & Cólera de Patrick Deville.

El cólera, enfermedad intestinal aguda, se presentó en repetidos brotes epidémicos por el mundo durante el siglo XIX. Sobre este mal destaca La muerte en Venecia de Thomas Mann, El húsar en el tejado de Jean Giono y El amor en los tiempos del cólera de Gabriel García Márquez.

Por último, alrededor de la tuberculosis, que es una enfermedad contagiosa de lento progreso que afecta los pulmones y que también alcanzó proporciones epidémicas durante el siglo XIX, se creó un ideal de belleza lánguido, febril y pálido, particularmente para las mujeres. Éste se expresa en obras como La dama de las camelias de Alejandro Dumas y María Luisa de Mariano Azuela. Además, esta enfermedad generó la separación, el aislamiento y el reposo de quienes la padecían y de ello dan cuenta La montaña mágica de Thomas Mann y Pabellón de reposo de Camilo José Cela.

Eric Ramírez