Como parte del Seminario Permanente de Educación, la Facultad de Medicina (FM) y las fundaciones UNAM y Carlos Slim organizaron la conferencia magistral “Diálogos con expertos de la ciencia”, en la que participaron dos figuras de reconocimiento internacional en temas fundamentales para la Salud Pública: la investigación genómica y la vacunación.
La genómica en 2018 ¿Hemos cumplido las metas?
En la sesión -coordinada por el doctor Roberto Tapia-Conyer, profesor de la FM y director General de la Fundación Carlos Slim-, el doctor Eric Lander, director General del Broad Institute del Massachussets Institute of Technology (MIT) y la Universidad de Harvard, aseguró que los avances en genómica a nivel global han sido sorprendentes en los últimos años. “La primera secuenciación de un genoma humano completo llevó 13 años y costó 3 mil millones de dólares estadounidenses. Hoy en el Broad Institute secuenciamos un genoma humano, en promedio, cada 11 minutos y cuesta menos de mil dólares”.
El también profesor de Biología en el MIT afirmó que “hoy podemos explicar de verdad los procesos biológicos que dan lugar a las enfermedades. Es maravillosa la variación genómica que hemos ido descubriendo y estamos observando fenómenos que no esperábamos.
“Puedo darles ejemplos en enfermedad cardiovascular o en cáncer, en los que nada más por saber cuáles son los genes, las proteínas y las vías metabólicas a través de las cuales se desarrollan esos padecimientos, se puede reorganizar todo el pensamiento sobre la terapéutica. Todos los textos de Medicina Interna se están reescribiendo, basándonos en este nuevo conocimiento de los genes. Por supuesto no vamos a dejar los libros anteriores porque la fisiología es muy importante, pero ésta no puede conducir al avance necesario en la prevención y la terapéutica si no se le acopla al estudio de los mecanismos celulares a niveles sumamente detallados”.
El doctor Lander adelantó que los avances en genómica tendrán un impacto en el desarrollo de herramientas diagnósticas y de tratamientos innovadores personalizados. “Todo esto cambiará de manera importante la forma en la que se hace la prevención y control de enfermedades para beneficio de la Salud Pública”.
El riesgo de la anti-ciencia global
El doctor Peter Hotez, decano de la Escuela Nacional de Medicina Tropical de la Facultad de Medicina de Baylor, destacó que gracias a la vacunación ha habido una reducción del 80 al 90 por ciento de las muertes en el mundo por sarampión, tétanos, difteria, tosferina, influenza, hepatitis B y rotavirus, entre otras. “Se estima que al año se salvan 2.5 millones de vidas gracias a iniciativas como la Alianza Global por las Vacunas que nació en el año 2000 para promover la vacunación en diferentes países. En 1980 se reportaban 2 millones de muertes por sarampión y en 2016 la cifra se redujo a 68 mil en todo el planeta”, mencionó.
El también titular de la Cátedra de Pediatría Tropical del Texas Children’s Hospital recordó que a raíz de un artículo de Andrew Wakefield, publicado en The Lancet, en 1998, donde afirmaba que el componente de sarampión de la vacuna triple viral ocasionaba inflamación en el colon y autismo en los niños, nació un movimiento anti-vacunación en Europa y luego en Estados Unidos de América, el cual se está extendiendo a otras partes del mundo, incluyendo Latinoamérica.
Aunque la revista británica retiró el artículo en 2010 al demostrarse que la información en la que se basó el estudio había sido falseada, fueron 12 años en los que muchos padres -principalmente educados, con una economía media o alta y con acceso al Internet y a las redes sociales- dejaron de vacunar a sus hijos. No obstante, “no existe relación entre la vacuna y el autismo, pues la evidencia científica señala que los cambios cerebrales en niños con esta enfermedad se dan en el primer o segundo trimestre del embarazo”, aseguró el doctor Hotez, quien tiene una hija de 25 años con autismo grave.
“El movimiento antivacunas no sólo ha impactado en la reducción de la cobertura de las enfermedades, también va a impedir que se desarrollen e introduzcan otras nuevas”, alertó el doctor Hotez al mencionar la importancia de desarrollar estrategias para evitar, con evidencia científica, la diseminación de información anti-vacunas en los países que hoy cuentan con exitosos programas de vacunación como México.
Lili Wences