La salud mental es un aspecto de la salud integral, no se puede gozar de un completo estado de bienestar sin ella y va más allá de la ausencia de enfermedades y trastornos. Un adecuado estado mental nos permite desarrollar de manera óptima las potencialidades de la vida, a nivel personal, laboral, académico y social.

Las enfermedades psiquiátricas y neurológicas que causan manifestaciones emocionales o conductuales cuentan con un 14 por ciento del peso global de todas las enfermedades. “Lo ideal es prevenir antes que curar cualquier tipo de padecimiento relacionado con enfermedades psiquiátricas; es importante capacitar a los médicos generales, ya que ellos son el primer contacto de personas que buscan ayuda o apoyo emocional y es necesario incluir la salud mental en las políticas de salud”, indicó la doctora Jacqueline Cortés Morelos, Responsable de la Clínica de Salud Mental del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNAM.

En el webinar “La importancia del cuidado de la salud mental en alumnas de la Facultad de Medicina”, transmitido por Facebook Live en el marco de las actividades del 8M, la especialista habló sobre el aumento de abuso de sustancias por parte de los jóvenes, entre otros problemas que se presentan en esta población como depresión; violencia de pareja; abuso sexual; bullying; embarazo; trastornos alimenticios como anorexia, bulimia y obesidad; adicción a las redes sociales; trastorno por déficit de atención e hiperactividad; y suicidio consumado, el cual ocupa el segundo lugar de causas de muerte en personas de 14 a 29 años de edad.

Por otra parte, destacó que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, los trastornos neuropsiquiátricos forman parte de las cinco causas más prevalentes de discapacidad, mortalidad y morbilidad en adolescentes, por ello hay que identificarlos para hacer una evaluación y dar un tratamiento temprano. “Tenemos que ver no solamente lo que nos dicen con palabras sino también lo que expresan con sus conductas, si lloran fácilmente o están irritables, incluso los profesores pueden ver cambios que afectan el desempeño de las alumnas en las aulas”, apuntó la doctora Cortés Morelos.

Dentro de las acciones que se pueden emplear para ayudar a las adolescentes a sobrellevar estos problemas, resaltó la gran repercusión que tiene proporcionarles amor y afecto, comprensión, impulsarlas para crear estilos de vida saludables, buenos hábitos y tener comunicación con ellas.

Entre las situaciones que afrontan las estudiantes y que merman el rendimiento escolar, mencionó las alteraciones del ciclo sueño-vigilia que pueden dar como resultado un sueño no reparador, los grandes trayectos de viaje que hacen para llegar a sus escuelas cuando las clases se imparten de manera presencial, la falta de Internet en las comunidades alejadas y el proceso de duelo inherente que se suscitó con las pérdidas y restricciones de la pandemia. Asimismo, recalcó que la Clínica de Salud Mental se encuentra disponible a través de la página http://psiquiatria.facmed.unam.mx/ para brindar consulta de manera virtual a la comunidad universitaria activa.

Ricardo Ambrosio