En la Noche de Museos de abril, voluntarios del Palacio de la Escuela de Medicina presentaron A flor de piel, donde mostraron enfermedades, secretos y datos curiosos de esta parte de nuestro cuerpo.

Omar Pérez Badillo presentó “El sistema tegumentario”, dónde habló de la piel y sus anexos: pelo, uñas, glándulas sudoríparas y sebáceas. “La piel ayuda con el revestimiento externo e interno, nos protege de invasiones bacterianas y agentes externos, a regular la temperatura, el dolor y el sentido del tacto”, resaltó.

Por su parte, Gina Molina habló de la “Melanina y la radiación solar”, donde destacó que la melanina es el pigmento que brinda el color característico de cada individuo y entre más oscura esté la piel, hay mayor actividad celular; asimismo, cuando hay mayor pigmentación, se está más protegido contra los efectos del envejecimiento y cánceres cutáneos. Sin embargo, para que pueda cumplir estas funciones, se recomienda usar cremas hidratantes y protector solar.

En tanto, Carlos Daniel Aguilar Pérez ofreció la plática “Sala de ceras del Siglo XIX”, dedicada a las enfermedades de la piel. Estas piezas fueron traídas de París, Francia, encargadas por el doctor Leopoldo Río de la Loza, que en 1870 era director de la Escuela Nacional de Medicina de México. La finalidad de éstas era que los estudiantes pudieran observar de cerca y diferenciar las distintas enfermedades de la piel.

Entre las alteraciones que se pudieron observar está la lepra lepromatosa, la cual es una enfermedad granulomatosa sistémica crónica y contagiosa; otra es el sarampión, que genera ampollas y pérdidas de piel; acné, que ocurre cuando los folículos pilosos se tapan con grasa y células cutáneas muertas; la rubeosis, caracterizada por la coloración roja de la piel por la formación de vasos sanguíneos; la sífilis temprana, que es una úlcera abierta e indolora en los genitales, la boca, la piel o el recto; la alopecia sifilítica, que sólo aparece en un 4 por ciento de los pacientes; las farmacodermias, siendo el tipo más frecuente de reacción cutánea inducida por medicamentos; los cánceres de piel; y la tiña fávica, una forma de dermatofitosis de carácter crónico, producida por Trichophyton schöenleinii.

Por otro lado, Janeth Santos habló de la “Sala de cirugía reconstructiva” del Palacio, donde se enfocó en los injertos de tejido, los cuales sirven para ayudar en la cicatrización de heridas profundas y pueden ser autólogos, homólogos, aloinjertos y heterólogos.

Finalmente, Eduardo Parrazal habló sobre “El cáncer de piel”, una de las enfermedades más frecuentes en el mundo, definido como un crecimiento excesivo, desorganizado e invasivo de las células de la piel. Los tres tipos más frecuentes son carcinoma basocelular, carcinoma espinocelular y melanoma. Para prevenirlo es recomendable evitar el sol y permanecer en la sombra lo más posible, usar ropa que proteja brazos y piernas, usar sombrero, gafas de sol, protector solar factor 30 o más y evitar las camas de bronceado.

Eric Ramírez