Tener estudiantes sanos dedicados al deporte de alto rendimiento y con acceso a herramientas que les permitan mejorar su desempeño, así como identificar sus posibles riesgos, es una pieza fundamental para el cumplimiento de la responsabilidad de fomentar e incentivar la disciplina constantemente.

Por esa razón, por primera vez el Programa de Actividades Deportivas y Recreativas (PADyR) de la Coordinación de Servicios a la Comunidad de la Facultad de Medicina realizó pruebas morfofuncionales a los representantes de las diferentes disciplinas de conjunto e individuales para conocer su estado de salud y medir sus capacidades físicas.

Esta iniciativa tiene como propósito que las y los deportistas evolucionen progresivamente, descubran el potencial de sus aptitudes y logren mantener un nivel competitivo óptimo para traer los mejores resultados en los próximos Juegos Universitarios.

Surgió a partir de la propuesta hecha por Luisa Daniela Fortuna Camacho, pasante de la Licenciatura en Fisioterapia y capitana del equipo representativo de deportes acuáticos, y el médico pasante Ricardo Emmanuel Medina García, quienes hacen su Servicio Social en dicho Programa.

“Aunque teníamos conocimiento de otros proyectos sobre pruebas físicas, notamos que hacía falta un examen completo como el que realizan en la Dirección de Medicina del Deporte de manera gratuita sólo a quienes representan a la UNAM. Entonces, decidimos sustituir las pruebas para llegar a resultados muy similares y, con ello, ponerlo al alcance de todas y todos los deportistas de la Facultad sin ningún costo. Del mismo modo, los entrenadores podrán tener un parámetro para mejorar sus entrenamientos”, señaló Luisa Daniela.

Durante los días de evaluación (20, 21 y 23 de febrero, y 3 de marzo), se instalaron diferentes estaciones en la explanada roja correspondientes a las diferentes áreas de la prueba morfofuncional: Historia Clínica, Biomecánica, Ergometría, Nutrición y Antropometría. “Nos aseguramos de los antecedentes del deportista; medimos sus cualidades físicas como resistencia, elasticidad, fuerza muscular; y hacemos una estimación de su gasto energético y las calorías que debe consumir, entre otras cosas”, explicaron.

Fotografías cortesía del PADyR, FM, UNAM

Se trata de un proyecto a corto plazo, pero que podría tener implicaciones a futuro en la carrera deportiva de cada estudiante. En ese sentido, se tienen previstos tres periodos más de pruebas este año: mayo, junio y septiembre; es decir, estarán evaluando y comparando los resultados de cada tres meses, en promedio. “Con base en el análisis de esos datos cuantitativos, a través del tiempo, se puede observar el avance o retroceso de la capacidad de rendimiento”, puntualizó Ricardo Emmanuel.

Isabel García