Con el objetivo de conocer más sobre el fascinante mundo de la creatividad y los mecanismos que subyacen en los pensamientos, en el marco de la exposición de Las alucinaciones de Antonio Gritón, el Palacio de la Escuela de Medicina realizó el conversatorio “Los procesos mentales y la creatividad. ¿Por qué creamos lo que creamos?”.
En el Paraninfo, el doctor José Camacho, miembro y exPresidente de la Asociación Psicoanalítica Mexicana (APM), mencionó que “el ser humano es creador por naturaleza; es su forma de sobrevivir al desamparo. Por ejemplo, en el útero materno estamos protegidos, es un lugar seguro donde obtenemos oxígeno y alimentación a través de un ambiente que regula nuestro metabolismo y temperatura. Sin embargo, al nacer, el corazón y los pulmones deben proporcionar lo perdido, es decir, se desarrollan ciertos mecanismos fundamentales para satisfacer las necesidades básicas y construir una imagen que amortigüe la ausencia materna”.
La doctora Ana María Maxwell, socia titular en la APM, comentó que “el proceso creativo surge del deseo de expresión y auto-renovación, es una profunda necesidad de transformarse a uno mismo; el arte se convierte en la vía que brinda la posibilidad de materializar este deseo, permitiéndonos mostrar nuestra verdadera esencia en toda la extensión de la palabra. En ese sentido, podemos identificar ciertas similitudes con el proceso psicoanalítico, donde se despliega la subjetividad a través de la co-creación de una relación entre analista y paciente, en la que es necesario acompañarlos en un espacio donde cada individuo pueda ser uno mismo”.
Desde una perspectiva artística, el dramaturgo José Luis Cruz, exDirector de Teatro UNAM, señaló que “en nuestro contexto cultural mexicano, hemos sido testigos de un impulso creativo y una búsqueda constante de innovación que persisten a pesar de las adversidades políticas y prácticas gubernamentales que han tratado de depauperar la cultura. En el país hay una increíble creatividad en todas las manifestaciones artísticas, y considero que los patrones de pensamiento, que hemos tenido la fortuna de preservar, están intrínsecamente conectados con los impulsos del subconsciente”.
Por su parte, el artista plástico y promotor cultural Antonio Gritón indicó que “en ocasiones, mientras pintamos, perseguimos una satisfacción que se transforma en algo estético, es decir, buscamos experimentar una emoción a través de nuestra creación. Por otro lado, Karl Marx definió el arte como aquello que se vuelve sublime para un grupo social en un periodo histórico determinado. Por ejemplo, para mí, un acto que me conmueve es cómo en la frontera brindan comida a los migrantes que viajan sobre el tren, y es un hecho que se vuelve sublime en este momento”.
Finalmente, el público externó sus opiniones a los ponentes, propiciando un intercambio de conocimientos. Esta actividad fue moderada por la maestra Gabriela Galindo, fundadora de la Editorial Tule Multimedia, y coordinada por la doctora Mónica Espinosa, responsable de Promoción y Difusión Cultural del Palacio.
Karen Hernández